Muere la actriz Patricia Hitchcock, la única hija de Alfred Hitchcock

Para ella su padre era su mayor crítico, pero fue quien le dio sus grandes roles en la pantalla y la hizo brillar. Hoy, esa estrella se apagó súbitamente… Patricia Hitchcock murió en Thousand Oaks (California), cerrando así una de las dinastías más importantes del Hollywood de los años dorados.

Patricia fue la única hija del director Alfred Hitchcock y la guionista Alma Reville. Nació en Londres en 1928, pero en 1939 se mudó a Los Ángeles junto a sus famosísimos padres. Fue en la meca del cine donde desarrolló su vocación y, aún siendo una adolescente, debutó en teatro. Si bien su carrera comenzó en Estados Unidos, su padre quería que se formará en su país natal por lo que el envío de regreso a casa para formarse antes de comenzar a trabajar en la industria del cine formalmente.

De regreso en Los Ángeles, comenzó a trabajar en televisión hasta que su padre le dio su primera oportunidad en cine con Pánico en la escena, a la que siguieron Extraños en un tren y Psicosis; aunque siempre se la recordará por su rol de Barbara Morton, una chica divertida y con gafas, en Extraños en un tren.

En 1956, Patricia trabajó en Los diez mandamientos de Cecil B. DeMille y poco después se retiró de la escena para dedicarse de lleno a la crianza de sus tres hijas, fruto de su matrimonio con Joseph O’Connell.

En los ’70 volvió a actuar por placer junto a sus hijas en dos filmes para televisión. En los ’80 dijo que no fue la gran musa de su padre porque éste se oponía al nepotismo, razón por la cuál no le dio más papeles. Aún así, colaboró en la revista “Alfred Hitchcock’s Mystery Magazine”, y en 2003 coescribió, junto a Laurent Bouzereau, la biografía de su madre “Alma Hitchcock: The Woman Behind the Man”. Su apellido suena a cine y con su partida queda grabado para siempre en los créditos de la historia del séptimo arte.