Así se hizo la frenética persecución del Joker en The Dark Knight

Cuando se habla de Batman en el cine es seguro que una de las primeras ideas que viene a la mente es The Dark Knight. La segunda película de la trilogía de Christopher Nolan fue en extremo perfecta, mostrando un historia digna de los mejores cómics del murciélago, un gran despliegue actoral y de efectos especiales.

The Dark Knight llegó a las salas en julio del 2008, el filme venía golpeado fuertemente por la repentina muerte del actor Heath Ledger, el responsable de convertirse en el nuevo Joker. Las miradas se posaban no solo en la película de Nolan, sino también en lo que fue una de las últimas actuaciones de Ledger.

La película sorprendió con creces tanto a la crítica como al público en general. Las reseñas positivas llovían por doquier, todas destacando desde la puesta en escena hasta la increíble labor de Ledger convertido en un Joker tan enigmático como atemorizante.

El filme de Nolan contó con un elevado presupuesto de $185 millones de dólares, por lo que su trabajo en la recaudación no iba a ser sencillo. La nueva aventura de Batman se encargó de arrasar con las taquillas en todo el mundo, rompiendo récords a diestra y siniestra, incluso llegó a sumar más dinero cuando se presentó la edición hogareña en DVD y Bluray.

Christopher Nolan, al igual que otros directores, trata que sus creaciones tengan la menor cantidad posible de CGI, ya que prefiere los efectos clásicos, los que aportan más realismo a sus historias, The Dark Knight no fue una excepción.

Dentro de esta aclamada película de Batman abundan escenas para el recuerdo, pero sin duda una de las más recordadas es la persecución del Joker (Ledger) al convoy del GPD transportando al juez de distrito Harvey Dent (Aaron Eckhart).

La escena tiene inició luego de que Dent confesara ante las cámaras, en pos de atrapar al Joker, que él era el vigilante nocturno. Acto seguido el juez es transportado al GPD por un grupo armado de policías y de SWAT. El Joker no iba a hacer fácil la situación, ya que había fraguado un plan para destruir el convoy y capturar a Dent. Allí se da la frenética persecución del villano y sus esbirros a Dent y los miembros del GPD.

Cuando el Joker utiliza el armamento pesado entra en escena Batman a toda velocidad con el Tumbler para hacer estragos. Justo cuando el desquiciado villano está por impactar el vehículo de Harvey, el Caballero Oscuro se sacrifica para salvar la situación. Batman termina estrellándose y perdiendo casi por completo al Tumbler. El Murciélago también tenía un As bajo la manga, ya que de los escombros de su vehículo emerge uno nuevo, el batpod (o batimoto, como prefieran ustedes). De esta manera el héroe puede completar la persecución para capturar al Joker.

La escena en cuestión tiene un detalle que pocos conocen y es que la mayor parte del metraje de la persecución fue rodado con modelos a escala de los vehículos. Para recrear la situación se construyeron modelos del Tumbler, el camión Slaughter y el camión de basura y varias patrullas del GPD en tamaño a escala. Se armó un túnel para simular el real y se rodaron las escenas más peligrosas, esas que ni los stuntman pueden conseguir. El impacto del Batimóvil al camión de la basura, la explosión y posterior choque del vehículo y otras más fueron grabadas gracias a las maquetas.

El trabajo en postproducción terminó por unir estas escenas junto a las rodadas con los actores y el resultado es perfecto, tan real que nadie sospechaba que los vehículos eran a escala.

Toda la trilogía de Batman de Nolan se encuentra disponible en HBO Max.

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