¿Es Everything Everywhere All at Once una de las peores ganadores del Oscar de la historia?

¿Es Everything Everywhere All at Once una de las peores ganadores del Oscar de la historia?

La película dirigida por Daniel Kwan y Daniel Scheinert fue cuestionada por gran cantidad de cinéfilos por su arrasador triunfo en los Premios de la Academia.

Nicolás Berte

Una vez pasada la espuma de la gala de entrega de los Premios Oscar es momento de sacar algunas conclusiones. Como suele pasar después de cada ceremonia, los ganadores nunca dejan conformes a todos. Sin embargo, en este caso se repitió algo que viene sucediendo en los últimos años con este premio: hubo una gran cantidad de personas que consideraron injusta la ganadora a Mejor película. 

Everything Everywhere All at Once (Todo en todas partes al mismo tiempo) se erigía como una de las favoritas para el premio, no sólo por sus 11 nominaciones, sino porque ya venía ganando la mayoría de los galardones previos, anticipando lo que podía ser su gran noche en el Dolby Theatre. A pesar de ello, hubo algunos cinéfilos que esperaban que se diera la sorpresa y que ganaran alguna otra de las nominadas. 

La realidad es que la Academia viene premiando películas que no perduran en el tiempo, impostando esa actitud de arrepentimiento tras tantos años de discriminación en la industria. Si repasamos las ganadoras de los últimos 10 años, notaremos que se encuentran algunas película como Green Book, La Forma del Agua o CODA, películas que no dejaron su huella, que una vez pasada la euforia del premio quedaron olvidadas. De esta manera, surge la pregunta si la película de los Daniels no será una más que quede olvidada en el tiempo, si se sumará a la lista de películas oscarizadas que luego son consideradas como "las peores ganadoras". 

Esta suerte de oxímoron puede ejemplificarse, yendo atrás en el tiempo, con How Green was my Valley (¡Qué verde era mi valle!), que ganó por sobre Citizen Kane (Ciudadano Kane), una película considerada por años como la mejor de la historia. O como el caso de Shakespeare in Love (Shakespeare apasionado) que en 1999 ganó por sobre La Delgada Línea Roja, quizás la mejor película bélica jamás creada, junto con la inolvidable Apocalypse Now de Coppola (que tampoco ganó, aunque la premiada fue Kramer vs Kramer, otro gran film). 

La película, además, arrasó en la categoría de actores y actrices

En este caso, se abren dos aristas: la primera, hay que considerar las demás candidatas de este año. Para quien suscribe, no era la mejor, pero también es cierto que no hubo grandes competidoras, que probablemente tampoco serán puestas en el olimpo de obras maestras. Por lo tanto, es casi una certeza que si hubiera ganado otra de las nominadas, el cuestionamiento surgiría de la misma forma. 

La segunda tiene que ver con la película en sí. Everything Everywhere All at Once es una buena película. La propuesta es atractiva, quizás no totalmente original pero sí algo distinto a lo que suele ofrecer Hollywood. Se anima, además, a explorar nuevas formas narrativas, juegos visuales, cambios en la relación de aspecto y algunos detalles más que, repito, no se tratan de cosas totalmente originales, pero sí ordenados de una manera efectiva y entretenida. 

Por lo tanto, no será una película para la posteridad, que no entrará en la discusión como las grandes obras de la historia, pero seguramente habrá dejado algo para recordar, una semillita que puede traer nuevas formas a la gran industria, ya no como novedad sino más como regla. Y eso no es para menospreciar. 

Suscríbete a nuestro newsletter para recibir todas las novedades y participar de concursos exclusivos desde aquí.

Temas