David Lynch habló sobre su frágil salud: "Apenas puedo caminar por una habitación”

David Lynch es, sin duda, uno de los autores más influyentes y venerados en la historia del cine. Con obras como Twin Peaks, Blue Velvet y Mulholland Drive, su estilo surrealista y su capacidad para transformar lo cotidiano en algo profundamente inquietante lo han convertido en una figura imprescindible del séptimo arte. Cada noticia sobre Lynch genera interés inmediato, y recientemente, su actualización sobre su estado de salud no ha sido la excepción.

El director de 78 años reveló en entrevistas recientes que enfrenta un grave deterioro en su salud debido al enfisema, una enfermedad pulmonar crónica que dificulta la respiración. En una charla publicada por People esta semana, Lynch explicó que ahora depende de oxígeno suplementario para tareas simples y confesó: “Apenas puedo caminar por una habitación. Es como si estuvieras caminando con una bolsa de plástico alrededor de la cabeza”.

El diagnóstico de enfisema llegó en 2020, y aunque inicialmente continuó fumando, finalmente dejó el hábito hace dos años. “Fumar fue una parte muy importante de mi vida”, comentó el director, quien empezó a fumar a los ocho años. A pesar de que reconoce que fue un “precio muy alto a pagar”, afirma que no se arrepiente: “Deseo lo que todo adicto desea: que lo que amamos sea bueno para nosotros”.

La relación de Lynch con el cigarrillo no solo marcó su vida personal, sino que también fue parte clave de su obra artística. Los cigarrillos fueron un elemento recurrente en sus películas, desde los personajes de Blue Velvet hasta la atmósfera cargada de Twin Peaks. Según Lynch, incluir este detalle nunca buscó glorificar el tabaquismo, sino reflejar la realidad: “Algunos personajes eran fumadores, como en la vida real”.

A pesar de todo esto, David Lynch también aprovechó para advertir sobre los riesgos del tabaquismo. Con la esperanza de que su historia sirva de lección, dijo: “Quería transmitirles esto: piénsenlo. Pueden dejar estas cosas que los van a matar”.

“Todos los fumadores tienen en la cabeza que es saludable, por lo que literalmente están jugando con fuego”, afirmó. “Puede picarte. Yo me arriesgué y me picó”.

Pese a las dificultades, Lynch no ha perdido su espíritu creativo. En agosto, lanzó el álbum Cellophane Memories junto a Chrystabell y, aunque dirigir en persona parece ahora inalcanzable, no descarta hacerlo de forma remota en el futuro. “Nunca me jubilaría”, aseguró manteniendo su pasión intacta.