Nosferatu: así fue la impactante transformación de Bill Skarsgård en el Conde Orlok

El actor contó detalles de cómo se preparó para interpretar al complejo personaje.
Bill Skarsgård interpreta al Conde Orlok en Nosferatu.
Bill Skarsgård interpreta al Conde Orlok en Nosferatu. Foto: A24

La nueva versión de Nosferatu finalmente ha revelado el impactante cambio físico de Bill Skarsgård para interpretar al Conde Orlok en el filme. El actor, conocido por su papel de Pennywise en It, enfrentó uno de los desafíos más complejos de su carrera para dar vida al legendario vampiro.

El proceso de caracterización incluyó extensas prótesis y un cambio radical en su voz. Skarsgård trabajó con un coach de ópera para bajar su registro vocal una octava completa. El resultado es un acento transilvano con particular énfasis en las erres y un habla pausada y meticulosa.

Mirá el tráiler de Nosferatu:

La transformación física siguió un diseño digital creado por el director Robert Eggers dos años antes del rodaje. El equipo de efectos especiales, liderado por David White, esculpió un busto que capturaba la visión del director: un rostro esquelético con pómulos prominentes y piel en descomposición.

Durante las pruebas iniciales, Skarsgård enfrentó momentos de duda. El actor temía no poder transmitir su interpretación a través de las prótesis. Sin embargo, todo cambió en la segunda prueba de cámara, cuando logró conectar con el personaje bajo la tenue luz de las velas.

Para mantener la intensidad del papel, Skarsgård se mantuvo alejado del elenco durante el rodaje. Eggers, recordando la soledad que el actor experimentó durante la filmación de It, le permitió socializar los fines de semana pero exigió distancia en el set.

La nueva versión de Nosferatu llega el 2 de enero a los cines.

A sus 34 años, Skarsgård considera que este papel representa un salto aún mayor que su interpretación de Pennywise, que realizó a los 26. El actor reconoce que aquella experiencia cambió su forma de abordar los personajes y lo preparó para este nuevo desafío.