Este clásico del cine ganador del Oscar contiene la “peor actuación” de Keanu Reeves
Una de las mejores películas de vampiros de la historia del cine cuenta con la performance del actor, la cual es considerada injustamente por muchos como una de las peores de su carrera. En la nota, los detalles.
En 1992, Francis Ford Coppola presentó una de las versiones más frescas y originales de Drácula en décadas. Su apasionada adaptación de la trágica novela romántica de Bram Stoker es una rara combinación de extravagancia y poderosa fantasía.
Aunque ha dividido opiniones, la actuación de Keanu Reeves como Jonathan Harker es una parte fundamental de este controvertido filme. Su interpretación ha sido duramente criticada por expertos y fanáticos del terror, pero en realidad, entrega exactamente lo que la historia necesita.
La actuación de Keanu Reeves es fiel a la novela

La novela Drácula de Bram Stoker, publicada en 1897, ha sido adaptada innumerables veces, pero su núcleo permanece intacto: el joven abogado Jonathan Harker ayuda al enigmático Conde Drácula a adquirir propiedades en Londres, sin darse cuenta de que su cliente es un vampiro con interés en su prometida, Mina. Rescatar a Mina del seductor Conde requiere los esfuerzos colectivos de Harker, el cazador de vampiros Abraham Van Helsing, y varios aliados humanos.
En la adaptación de Coppola, Gary Oldman interpreta al carismático Conde Drácula, un personaje dividido entre sus impulsos depredadores y su amor profundo por Mina. Mina simpatiza con el tormento de Drácula y se siente atraída por su profundidad y su visión del mundo, un marcado contraste con la naturaleza dulce y simple de su prometido, Jonathan Harker.
La historia de Drácula en esta adaptación gira en torno a la evolución personal de Mina, quien aprende a compadecerse de los monstruos mientras resiste la tentación de entregarse a la oscuridad. Al final, Mina es la heroína de Drácula, mientras que Jonathan Harker es el ingenuo. Ignorante e inmaduro, pasa por alto todos los presagios oscuros en el castillo de Drácula hasta que se convierte en prisionero. No es un caballero heroico, sino una víctima casi indefensa que necesita reunir a un equipo de vigilantes más competentes para salvar a su prometida.
El papel de Harker exige a un actor como Keanu Reeves. Sin embargo, desafortunadamente, los críticos se centraron en los aspectos equivocados de su actuación.
Keanu Reeves es un Jonathan Harker excepcional

La adaptación cinematográfica de Coppola dividió a muchos espectadores. Recibió cuatro nominaciones al Óscar, ganando tres, pero mantiene un modesto 69% en el Tomatometer de Rotten Tomatoes. Para algunos, fue la realización perfecta del romance sadomasoquista de Stoker; para otros, era demasiado extravagante como para tomárselo en serio. Keanu Reeves fue uno de los puntos más polémicos, apareciendo en listas de críticos como uno de los peores ejemplos de casting y acentos mal logrados.
En una entrevista con Entertainment Weekly, Francis Ford Coppola abordó las críticas que el actor recibió por su interpretación. El director explicó que el actor canadiense simplemente intentó demasiado esforzarse en perfeccionar su actuación, con resultados desafortunados.
El comentario del cineasta, quizás sin darse cuenta, demuestra por qué Reeves es perfecto para Jonathan Harker. Mina menciona que no han consumado su relación porque Jonathan cree que es demasiado pobre para merecerla. Es inexperto, virginal y está intentando muy duro ser lo suficientemente bueno para su prometida, del mismo modo en que el actor fue acusado de estar fuera de su alcance en comparación con los otros miembros del elenco de Coppola.
Independientemente de si la actuación de Reeves es un ejemplo destacado de su oficio, es innegable que encaja perfectamente con Jonathan Harker. El personaje debe ser juvenil, inmaduro y un tanto ansioso por ganarse la confianza y el respeto de quienes lo rodean. Aunque muchos fanáticos del terror pueden nombrar a su actor favorito como Drácula, pocos hablan de Jonathan Harker; de hecho, el del actor es uno de los pocos Harkers que se recuerda, y tal vez haya buenas razones para ello.
Drácula, de Bram Stocker se encuentra disponible para ver en streaming en Max.