El drama criminal protagonizado por Al Pacino y basado en una historia real que debes ver hoy
Esta impactante cinta sigue el caso real de un hombre atrapado en una red de crimen y corrupción; un thriller imperdible que expone los límites de la justicia y la moralidad.
Al Pacino nos ha regalado algunas de las mejores actuaciones en la historia del cine criminal. Desde el calculador Michael Corleone en El Padrino hasta el despiadado Tony Montana en Scarface, el actor ha sido un maestro del género. Pero Serpico es Pacino en su esencia, con un giro inesperado: un drama criminal en el que interpreta a un policía de Nueva York frustrado y decidido a exponer la corrupción dentro del grupo de agentes.
Basada en una historia real, la película de 1973 marcó la primera vez que Pacino interpretó a una persona real, algo que tomó con gran seriedad. Y, aunque no es el típico papel que los fanáticos han llegado a conocer y amar, sigue dominando cada escena con la misma intensidad. De hecho, su actuación le valió varios premios y nominaciones.
¿De qué trata Serpico?

La película sigue a Frank Serpico, un oficial de la policía de Nueva York que es trasladado de urgencia al hospital tras recibir un disparo en el rostro. Con el temor de que el atacante haya sido uno de sus propios compañeros, la historia se desarrolla a través de flashbacks que muestran su trayectoria.
Recién salido de la academia, Serpico destaca por su apariencia bohemia y descuidada, lo que lo convierte en blanco tanto de criminales como de sus colegas. Cuando informa sobre un intento de soborno, descubre que la corrupción está profundamente arraigada en el departamento, con oficiales que aceptan sobornos de criminales y pequeños negocios. Al negarse a participar, se enfrenta a hostilidad, aislamiento y peligro.
Decidido a exponer la corrupción, lleva su caso a sus superiores, pero cada intento es rechazado. A medida que su frustración crece, también lo hace la amenaza en su contra. Desesperado, decide contar su historia a The New York Times, obligando a la policía de Nueva York a tomar medidas. Pero el costo es alto. Lo que comienza como un esfuerzo por limpiar el sistema se convierte en una lucha por sobrevivir, ya que se da cuenta de que decir la verdad podría costarle todo.
Serpico recibió elogios de la crítica y numerosos premios y nominaciones, incluyendo el Globo de Oro a Mejor Actor para Pacino y nominaciones al Oscar a Mejor Actor y Mejor Guion Adaptado. También ganó el premio a Mejor Guion Adaptado en la 26ª edición de los Premios del Sindicato de Guionistas de América.
La verdadera historia de Serpico

La corrupción en la policía de Nueva York durante la época de Frank Serpico era profunda y sistémica. Los oficiales aceptaban sobornos de criminales, cobraban dinero de protección y preservaban a las mismas personas que debían arrestar.
Tal como muestra la película, durante cinco años Serpico fue acosado, amenazado y tratado como un traidor por sus propios compañeros. Cada intento de denunciar la corrupción fue ignorado o descartado. Sus superiores no querían escuchar, y quienes podían hacer algo al respecto preferían mirar hacia otro lado. Así que, cuando se dio cuenta de que su vida estaba en peligro, tomó la decisión desesperada de hacerlo público y llevó su historia a The New York Times.
El impacto fue inmediato. Se creó la Comisión Knapp para investigar la corrupción policial y la policía de Nueva York se vio obligada a actuar. Pero para Serpico, ya era demasiado tarde. Había hecho demasiados enemigos. El 3 de febrero de 1971, participó en una redada antidrogas en Brooklyn, donde recibió un disparo en el rostro. Sus propios compañeros no pidieron ayuda y lo dejaron a su suerte. Sobrevivió de milagro, pero la bala le dejó secuelas permanentes, incluida la pérdida de audición y fragmentos alojados en su cerebro.
La película refleja con precisión la historia real, y la interpretación de Pacino es prácticamente exacta. Ambos han hablado en entrevistas sobre cómo el actor estudió detenidamente a Frank Serpico, desde su forma de hablar hasta su lenguaje corporal.
En una entrevista con QQ en 2019, el actor explicó: "Antes de conocer a la persona a la que debía interpretar, no quería hacerlo. Era algo extraño. No porque fuera bueno o malo, sino porque sentía que no podía ser él. Pero cuando conocí a Frank, supe que había algo que podía representar. Algo que podía transmitir. Tenía un pendiente, el pelo largo y un aspecto peculiar. Pero tenía una mirada en los ojos que pensé: ahí está. Llegué a conocerlo muy bien y pasé mucho tiempo con él."
Incluso el propio Serpico ha dicho que la cinta captura la realidad de sus años en la fuerza, hasta en los detalles más pequeños. En una entrevista de 2012 con el New York Daily News, llegó a decir: "Al Pacino me interpretó mejor de lo que yo mismo lo hice."
Serpico dejó la policía de Nueva York en 1972 y se exilió en Suiza y los Países Bajos, intentando alejarse de quienes querían verlo muerto. No fue hasta después del estreno de la película que regresó por completo a Estados Unidos, retirándose a una vida tranquila en el norte del estado de Nueva York. Décadas después, en 2022, la policía finalmente le otorgó la Medalla de Honor, intentando redimir su historia. Pero Serpico nunca necesitó su aprobación. Siempre supo que tenía razón, y eso era suficiente.
Un filme que hace justicia a una historia increíble, Serpico sigue siendo una de las mejores películas de Pacino. Es tensa, implacable y no edulcora la realidad de lo que enfrentó el protagonista. Puede que no sea la primera cinta que viene a la mente al hablar de lo mejor del actor, pero merece estar en la conversación.