50 años de 'Tiburón', la película de Steven Spielberg que cambió Hollywood para siempre
Estrenada en 1975, Tiburón no solo aterrorizó a toda una generación, sino que reinventó las reglas de la industria y sentó las bases del cine actual.

La película que redefinió el cine moderno.
Universal PicturesCuando Jaws ( Tiburón) llegó a los cines el 20 de junio de 1975, nadie imaginaba que una película sobre un tiburón asesino iba a marcar un antes y un después en la historia del cine. Pero lo hizo. Y no solo porque provocó que miles de personas miraran la playa con desconfianza durante años, sino porque cambió la historia de Hollywood. Y lo más increíble es que todo estuvo a punto de naufragar.
Con solo 27 años, Steven Spielberg se enfrentaba a su segundo largometraje, pero también su primera superproducción. Basada en la novela de Peter Benchley, la historia seguía a un enorme tiburón blanco que siembra el terror en un pequeño pueblo costero y un grupo de hombres que quieren cazarlo: el jefe de policía Martin Brody (Roy Scheider); el oceanógrafo Matt Hooper (Richard Dreyfuss); y el marinero Quint (Robert Shaw).
Aunque tenía los elementos necesarios para ser atractiva, lo que sucedió detrás de escenas fue una verdadera pesadilla. El tiburón mecánico no funcionaba, el rodaje se retrasaba constantemente y el presupuesto se excedía día a día. Pero en medio de ese caos nació un clásico eterno. Uno que le dio forma al blockbuster moderno y que convirtió a Spielberg en una estrella.
El primer blockbuster de la historia
Antes de Tiburón, los grandes estudios no apostaban por estrenos masivos. Las películas se lanzaban en pocas salas, y si funcionaban, se expandían. Pero Universal hizo algo inédito. Optó por estrenar Jaws en 464 salas al mismo tiempo, acompañada por una campaña publicitaria agresiva en televisión (algo raro para la época) y un timing perfecto, ya que se acercaba el verano, lo que era sinónimo de playa y vacaciones.
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El resultado fue explosivo. De un día para otro había multitudes haciendo fila, récords de taquilla, y un nuevo modelo de negocio que cambió para siempre la forma de estrenar películas. Así nació el blockbuster como lo conocemos hoy. Películas de gran presupuesto, estrenos masivos, promoción intensa, y una historia fácil de seguir pero imposible de olvidar. Sin Jaws, no habría Jurassic Park, Titanic, Avengers ni ninguno de esos "tanques" que hoy dominan la cartelera.
Spielberg, el maestro del suspenso (a la fuerza)
Uno de los grandes aciertos de Tiburón fue cómo manejó el miedo. Y, curiosamente, eso fue en parte por necesidad. El tiburón mecánico fallaba todo el tiempo, así que Spielberg tuvo que sugerir el peligro en lugar de mostrarlo. Esto obligó al director a recurrir al sonido, la edición y la icónica música de John Williams para generar tensión. Esa melodía minimalista, que constaba de dos notas repetidas, se convirtió en sinónimo de terror.
Ver poco al tiburón hizo que el miedo creciera en la cabeza del espectador. Fue un ejemplo perfecto de "menos es más", de cómo el cine puede lograr mucho con pocos recursos. De esta forma, Spielberg convirtió una limitación técnica en una ventaja creativa, que fue la consagración de un estilo y el inicio de una carrera imparable.
Un éxito monstruoso
Jaws fue la película más taquillera de la historia en su momento, y que sería superada dos años después por Star Wars. Recaudó más de 470 millones de dólares a nivel mundial (una cifra enorme para los años 70), y convirtió a Spielberg en el nuevo niño prodigio de Hollywood.
También fue nominada a varios premios Oscar, ganando Mejor montaje, Mejor sonido y Mejor banda sonora. Pero más allá de los premios, su impacto fue cultural. Tras el estreno de la película, la gente evitaba meterse al mar, se vendían camisetas y muñecos del tiburón, y la película pasó a ser parte del imaginario colectivo.
El lado oscuro del fenómeno
Pero no todo fue positivo. A raíz de su éxito, los tiburones pasaron a ser vistos como monstruos asesinos, lo que generó una ola de miedo infundado. Incluso hubo un aumento en la caza de tiburones en los años siguientes. Décadas más tarde, el propio Steven Spielberg confesó sentirse culpable por esa consecuencia involuntaria.
Con el tiempo, distintos biólogos marinos y documentales como Sharkwater ayudaron a cambiar esa percepción, recordando que los ataques de tiburones son extremadamente raros y que muchas especies están en peligro por culpa del ser humano, no al revés.
Un legado que resiste el paso del tiempo
A medio siglo de su estreno, Tiburón sigue siendo una película fundamental. No solo porque marcó el inicio de la era de los blockbusters, sino porque mostró cómo hacer cine con tensión, inteligencia y oficio. Su influencia puede verse en películas de terror, suspenso, aventuras y hasta en el marketing actual de estrenos.
Frases como “You’re gonna need a bigger boat” (vamos a necesitar un barco más grande) siguen citándose, y el tiburón Bruce (como lo apodaron en el set) se convirtió en una leyenda. Además, el filme sigue teniendo nuevas generaciones de fanáticos, y cada vez que se proyecta en pantalla grande, vuelve a generar esa mezcla de fascinación y miedo que lo hizo inolvidable.
A 50 años de su estreno, ninguna película de tiburones ha podido igualar el impacto que tuvo Tiburón, y probablemente seguirá estando en lo alto de podio en las décadas por venir. Larga vida a Bruce y al maestro Steven Spielberg.