La película de terror de 85 minutos que acaba de llegar al streaming y te sorprenderá con su original historia

La última película de Steven Soderbergh es considerada una de las mejores de 2024, y te dejará pensando hasta el final.

Una historia de fantasmas sin sustos pero inquietante. 

Una historia de fantasmas sin sustos pero inquietante. 

Neon

Con la cantidad de plataformas de streaming disponibles hoy en día, el catálogo de películas de terror nunca fue tan amplio ni tan diverso. Hay opciones para todos los gustos. Desde clásicos del género hasta nuevas propuestas independientes que se animan a romper con las fórmulas conocidas.

En este último podemos ubicar a la última película de Steven Soderbergh, que llega para demostrar que el miedo también puede construirse desde el silencio, la tensión emocional y lo que no se ve. Recién estrenada en Amazon Prime Video, este filme te dejará una sensación que no te podrás sacar tan fácilmente de la cabeza.

Soderbergh es un director que nunca se queda en su zona de confort. Lo suyo es experimentar, probar formatos, desafiar géneros. Desde La gran estafa, pasando por Traffic, Erin Brockovich, y hasta Magic Mike, es un cineasta que no se queda dentro de un solo género.

Para su última puesta en escena, Soderbergh decidió meterse en el género de terror con Presencia, una película contada desde el punto de vista más inusual: la del fantasma que habita en una casa, siendo observador de todo lo que sucede a su alrededor.

¿De qué trata Presencia, la película recién llegada a Amazon Prime Video?

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La historia sigue a la familia Payne que se muda a una nueva casa tras una tragedia personal. Lo que no saben es que en ese lugar habita una entidad que los observa en silencio.

Entre los integrantes de la familia se encuentran Rebecca (Lucy Liu), una madre intensa que se balancea entre la autoridad y la desconexión emocional; Chris ( Chris Sullivan), un padre afable que funciona como sostén emocional, aunque claramente no puede con todo; Tyler (Eddy Maday), el hijo mayor con actitud de sabelotodo y tendencia al bullying, y Chloe (Callina Liang), la más joven, que acaba de perder a su mejor amiga.

Mientras los miembros de la familia lidian con sus propios conflictos internos y traumas, el fantasma va conociéndolos y desarrollando un vínculo especial con Chloe. Este espíritu no está ahí para asustar, sino porque le quedó algo pendiente. No sabe exactamente qué es, pero necesita resolverlo. Mientras tanto, observa la rutina de los Payne, una familia rota por dentro aunque intente mantener las apariencias.

Tráiler oficial de Presencia:

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La particularidad de Presencia es el punto de vista que adopta, construyendo el terror desde otro ángulo. Al espectador no lo agarran por sorpresa con efectos sonoros ni sombras que se mueven bruscamente. El miedo nace de la incomodidad constante, del malestar que se acumula en las interacciones familiares, del silencio entre los personajes, de lo que no se dice. Y Soderbergh logra crear una atmósfera sofocante sin gritar, solo observando.

La cámara se convierte literalmente en los ojos del fantasma. No solo estamos viendo la historia, la estamos habitando desde el otro lado. Sentimos el encierro del espíritu, su frustración al no poder intervenir, su necesidad de ser escuchado. Es un enfoque que puede parecer arriesgado, pero funciona. Y cuando finalmente el ente logra manifestarse, lo hace por necesidad, no por maldad.

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Callina Liang interpreta a Chloe, la hija menor de la familia Payne. 

Callina Liang interpreta a Chloe, la hija menor de la familia Payne.

Lejos de ser una película más de fantasmas, esta apuesta por explorar las emociones humanas. Se mete de lleno en el duelo, los traumas y los vínculos rotos. Cada miembro de la familia lidia con su propia carga emocional, y esa tensión se vuelve el verdadero eje del film.

Con sus exactos 85 minutos de duración, Presencia no es una película que te quitará el sueño. Pero sí con una sensación de desasosiego y un final que no agradará a todos. Es de esas películas que se quedan rondando en la cabeza varios días después de haberlas visto.