Así es la historia real de Griselda Blanco, la narcotraficante que inspiró la nueva serie de Netflix
La nueva miniserie de Netflix, protagonizada por Sofía Vergara, cuenta la historia de una de las narcotraficantes más temidas de Colombia.
Uno de los recientes estrenos de Netflix es Griselda, la nueva serie original de la plataforma de streaming protagonizada por Sofía Vergara. La ficción fue creada por Eric Newman y Andrés Baiz, quien además dirige todos los episodios de la miniserie.
En esta ocasión, el dúo detrás de Narcos y Narcos: México vuelve a reunirse para contar la historia de una de las mujeres más temidas del mundo del narcotráfico: Griselda Blanco. En la serie, Vergara interpreta a Griselda, la ambiciosa jefa de uno de los carteles de droga más poderosos que se desempeñó en Miami durante las décadas de los 70 y 80.
Desde luego, la nueva serie de Netflix está basada en hechos reales. Pero como toda ficción inspirada en la realidad, hay algunos elementos que fueron modificados para poder ser adaptados en las 6 horas de duración de este show sobre una de las mujeres más temidas de Colombia.
Mira el tráiler de Griselda:
La verdadera historia de Griselda Blanco
Griselda Blanco, conocida como "La Madrina" y "La Viuda Negra", se convirtió en una de las figuras más temibles y legendarias del narcotráfico colombiano. Su historia, llena de violencia y poder, sirvió de fuente de inspiración de la nueva serie de Netflix protagonizada por Sofía Vergara.
Nacida en Cartagena, Colombia, en 1943, Griselda Blanco migró a Medellín con su madre a temprana edad. A los 14 años abandonó su hogar tras ser abusada por su padrastro. Su primer esposo fue Carlos Trujillo, quien fue el padre de sus tres hijos Uber, Osvaldo y Dixon. Algunos años más tarde, en la década del 70, contrajo matrimonio con su segundo esposo Alberto Bravo, con quien emigró a los Estados Unidos.
A los 21 años, llevó a sus tres hijos a Nueva York, donde comenzó su travesía criminal vendiendo marihuana para mantener a su familia. Blanco se introdujo en el mundo del narcotráfico como "mula", escalando rápidamente hasta liderar su propia organización delictiva. Su especialidad era la cocaína colombiana, y para 1973 ya estaba en el radar de la DEA, la agencia antidrogas estadounidense.
Bravo fue asesinado por la propia Blanco, luego de que esta lo encontrara con otra mujer. Luego vendría Darío Supúlveda, su tercer marido y con quien tendría a su cuarto hijo Michael Corleone Sepúlveda Blanco. Al igual que su anterior esposo, esta terminó asesinándolo en Colombia.
En Miami, Griselda Blanco jugó un papel crucial en la violenta guerra por la droga conocida como la Cocaine Cowboys Wars, transformando a la ciudad en un territorio sumamente peligroso. Fue acusada de múltiples asesinatos, incluyendo los de los narcotraficantes cubanos Alfredo y Grisel Lorenzo y del menor Johnny Castro. A pesar de ser encarcelada en 1994, fue liberada en 2004 debido a un tecnicismo legal.
Blanco fue pionera en el uso de sicarios en moto para ejecutar asesinatos, una modalidad que luego se volvería tristemente común. Su crueldad y sed de poder la llevaron a ser temida incluso por narcotraficantes de la talla de Pablo Escobar, con quien en algún momento formó una alianza. Esta sociedad terminó cuando la justicia norteamericana comenzó a investigarlos, forzando a Blanco a regresar a Colombia.
El reinado de Blanco en el mundo del narcotráfico fue marcado por la violencia extrema. Estuvo involucrada en la guerra de los "Cowboys de la droga", que resultó en cientos de muertes en Miami. Durante su periodo de mayor actividad, supervisaba el tráfico de 1.5 toneladas de cocaína a Estados Unidos cada mes, siendo responsable de introducir drogas por valor de más de 10 mil millones de dólares al año.
En 1985, Blanco fue arrestada en California y condenada por fabricar, importar y distribuir cocaína. Durante su tiempo en prisión, sus tres hijos mayores fueron asesinados, sobreviviendo solo Michael Corleone Blanco, su hijo menor. Liberada y deportada a Colombia en 2004, vivió en Medellín hasta su asesinato en 2012, cerrando así el capítulo de una de las narcotraficantes más temidas y poderosas de la historia?.