La historia real detrás de El secuestro de 1993, la película que triunfa en Netflix

La película cuenta una historia basada en hechos reales que conmovió a Nigeria en 1993.
El secuestro de 1993 se ha ubicado entre lo más visto de Netflix
El secuestro de 1993 se ha ubicado entre lo más visto de Netflix Foto: Netflix

El secuestro de 1993, la nueva película de Netflix, cuenta una historia basada en hechos reales que conmovió a Nigeria en 1993. Los acontecimientos retratados en el filme exponen una época de profunda crisis política y social en el país africano.

La trama se centra en un episodio histórico protagonizado por cuatro adolescentes nigerianos: Benneth Oluwadaisi, Kabir Adenuga, Richard Ogunderu y Kenny Rasaq-Lawal. Los jóvenes tomaron el control de un Airbus A310 de Nigerian Airways que cubría la ruta Lagos-Abuja, desviándolo hacia Niamey, capital de Níger.

El contexto político de la época resulta fundamental para entender sus motivaciones. En 1993, Nigeria atravesaba un momento crítico tras la anulación de las elecciones generales. La victoria de Moshood Kashimawo, del Partido Democrático Social, fue desconocida por el líder militar Ibrahim Babangida, quien tomó el poder por la fuerza.

Mirá el tráiler de El secuestro de 1993:

Los secuestradores, lejos de buscar beneficios económicos, exigieron dos demandas poco usuales: ser juzgados en tribunales de Níger y la posibilidad de contar su historia a través de la prensa. Su objetivo principal era visibilizar la corrupción gubernamental y la desigualdad social que azotaba a su país.

Durante el operativo de rescate, las fuerzas especiales lograron evacuar a mujeres y niños. Un dato crucial fue la presencia del hijo del embajador chino en Nigeria entre los pasajeros. Las autoridades idearon un plan que incluyó drogar su comida para justificar su evacuación y facilitar el posterior asalto al avión.

El secuestro de 1993 se ha ubicado entre lo más visto de Netflix

El desenlace del caso no registró víctimas fatales. Los cuatro jóvenes fueron capturados y cumplieron una condena de nueve años. Sin embargo, lograron su objetivo principal: el incidente expuso ante el mundo la crisis institucional nigeriana y las precarias condiciones de vida de gran parte de su población.

La película, que actualmente se ubica entre lo más visto de Netflix, toma algunas licencias creativas pero mantiene la esencia de la historia real. El director Robert Peters logra transmitir que los protagonistas no eran delincuentes profesionales, sino jóvenes desesperados que buscaban justicia en un sistema corrupto.