Netflix: ¿qué tan buena es Respira, la nueva serie española del creador de Élite?
La ficción de 8 episodios cuenta con las actuaciones de Nawja Nimri, Blanca Suárez y Manu Ríos.
Netflix está constantemente apostando por nuevo contenido y en el día de la fecha agregó a su catálogo Respira, la nueva serie española creada por Carlos Montero, conocido por otros grandes éxitos dentro del servicio como Élite, El desorden que dejas y Todas las veces que nos enamoramos.
En esta ocasión, Montero apuesta por una ficción que busca reflejar la realidad a través de un drama médico que nos muestra el día a día de un hospital público al borde del colapso, las presiones laborales y las tensiones personales se entrelazan para trazar una trama compleja e intensa.
¿De qué trata Respira?
Respira nos traslada al Joaquin Sorolla, un hospital público de Valencia que funciona al borde del colapso. El personal médico no da a vasto con la creciente demanda, los salarios son bajas, la falta de personal e insumos se hace sentir cada vez más, y los recortes presupuestarios causan estragos en un sistema sumido en la más profunda de las crisis.
En este contexto conocemos a los protagonistas de la historia. Por un lado encontramos a Biel, Rodrigo, May y Quique, un grupo de residentes que deben lidiar con largas jornadas de trabajo y sus vidas personales, mientras intentan seguir el ritmo a sus adjuntos, los doctores Jésica Donoso, Néstor Moa, y Pilar Amaro, entre otros.
Entre urgencias y problemas a resolver, un accidente traerá a la presidenta Patricia Segura a atenderse en el hospital. Y, por si fuera poco, los médicos deciden ir a huelga, sin garantizar servicios mínimos, y así exponer la precariedad con la que deben lidiar a diario. Esta situación provocará enfrentamientos entre los propios compañeros, quienes tendrán que decidir si continúan peleando por sus derechos, o si deciden cumplir con juramento que hicieron y seguir salvando vidas.
¿Vale la pena ver Respira?
En un ecosistema de series donde se han popularizado ficciones como Grey's Anatomy, New Amsterdam y The Good Doctor, esta nueva propuesta de Netflix trata de encontrar un camino propio, adoptando como bandera la defensa de la salud pública.
Su atractivo es innegable y la serie engancha desde sus primeros minutos. Hay un elenco atractivo integrado por nombres como Nawja Nimri, Blanca Suárez, Manu Ríos y Aitana Sánchez-Gijón, entre otros.
Además tampoco se aleja de los dramas personajes de cada uno de estos personajes, en donde habrá un poco de romance y dramas personales. Pero también hay urgencias que atender, heridas que curar y vidas que salvar, y las escenas en la sala de urgencia y los quirófanos no faltarán. Tampoco el cliffhanger del final que deja la puerta abierta para una segunda temporada, confirmada previamente en el mes de junio.
En otras palabras, Respira es la nueva serie de Netflix que apunta a convertirse en la más vista, abarca una temática atractiva y relevante, y su conteo de pocos episodios y corta duración, la hacen una opción más que atractiva para quienes buscan un nuevo título al que darle play. Pero ojo, Respira tampoco es perfecta. ¿Cumple su cometido al entretener y enganchar? Sí. ¿Pero cuenta con una narrativa coherente y bien desarrollada? No tanto.
Este último aspecto es el más cuestionable. Y es que el problema que presenta la serie es que quiere ser muchas cosas y no profundiza en nada. La mayor parte del tiempo se decanta por el melodrama y se queda en lo superficial de muchos aspectos.
La mayor parte del tiempo, la trama se presenta de forma fragmentada, con una sucesión de acontecimientos que a menudo carecen de coherencia y profundidad. En su intento por abarcar demasiados temas a la vez —huelgas, corrupción, desigualdades sociales— y, en su afán por sorprender al espectador, sacrifica el desarrollo de los personajes y la credibilidad de las situaciones que presenta.
Otro de los puntos débiles de Respira es su retrato de la sanidad pública. Si bien la serie plantea cuestiones importantes y urgentes, su enfoque resulta a veces superficial. Los personajes, especialmente los médicos, son presentados como héroes o villanos, casi sin matices ni ambigüedades. Y muchas veces caen en clichés y exageraciones con sus acciones, algo que dista mucho de la realidad que viven los profesionales sanitarios.
En líneas generales, Respira es una serie que se deja ver y seguramente atraerá la atención de quienes disfrutan de los dramas médicos. Pero quienes busquen mayor complejidad a nivel narrativo, probablemente no quedarán del todo satisfechos. La serie cuenta con 8 episodios de unos 40 - 50 minutos cada uno, todos ya disponibles en Netflix.