Final explicado de Trol 2, la película que arrasa en Netflix
El final de Trol 2, la película de acción y fantasía que arrasa en Netflix, despertó múltiples interpretaciones entre los espectadores.
Trol 2 deja todo abierto para una posible tercera parte
El final de Trol 2, la película de acción y fantasía que arrasa en Netflix, despertó múltiples interpretaciones entre los espectadores. Esta secuela retoma la mitología nórdica y expone un relato donde lo humano y lo ancestral chocan de manera violenta. Nora, la protagonista del primer filme, vuelve a enfrentar el dilema que la persigue desde la cinta original: comprender a los trolls o combatirlos antes de que la destrucción sea irreversible.
La trama gira alrededor de un gigantesco troll liberado por error, que comienza un recorrido devastador por Noruega. A diferencia del primer encuentro con estas criaturas, este nuevo ejemplar no busca coexistencia, sino venganza. El caos obliga a Nora y a su equipo a seguir los rastros de la criatura hasta las montañas, donde descubren un vínculo directo con antiguas disputas entre reyes, iglesias y la especie troll. La película profundiza en las tensiones históricas que marcaron el destino de ambas partes.
Mirá el tráiler de la película:
Con el avance del conflicto se revela el gran giro narrativo: el troll no es un monstruo irracional, sino un heredero mutilado por la violencia del pasado. La historia se intensifica cuando se descubre un decreto antiguo que evidencia que el rey Olaf nunca intentó exterminar a estas criaturas, sino convivir con ellas. Sin embargo, la iglesia tergiversó el relato, avivando un odio que ahora desata consecuencias fatales en el presente. Esta revelación es clave para entender el final de Trol 2.
La batalla definitiva llega cuando el equipo descubre que la única forma de detener al troll es atacar su corazón. Andreas asume el riesgo máximo y decide ejecutar un plan suicida: introducir agua bendita dentro del gigantesco cuerpo de la criatura y detonar una carga interna. El sacrificio tiene éxito. La bestia estalla, pero Andreas muere con ella. Su decisión cambia el rumbo de la historia y marca el cierre emocional más fuerte de toda la película.
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Aunque la amenaza parece resuelta, Trol 2 no concluye con un cierre pacífico. En la escena de créditos se revela que un científico logró clonar a un pequeño troll. La criatura crece lentamente, insinuando que el conflicto está lejos de terminar. Esta imagen final deja abierta la puerta para futuras secuelas, reforzando la idea de que el mundo de los trolls podría convertirse en una saga duradera.
En síntesis, el final de Trol 2 no solo funciona como cierre dramático, sino como una advertencia sobre lo que viene. La muerte de Andreas deja un vacío emocional, pero abre una nueva etapa donde la ciencia y el poder estatal podrían transformar a los trolls en un arma. La película se despide sembrando dudas, tensiones políticas y un escenario perfecto para continuar explorando esta historia en una posible tercera entrega.