Netflix: la miniserie japonesa con 100% de puntuación que no te puedes perder
Esta miniserie japonesa en Netflix logró un 100% de aprobación y se convirtió en una joya imperdible para los amantes del buen drama.
Asura, una emotiva miniserie de sólo 7 episodios que no puedes dejar de ver.
NetflixAunque Netflix es conocido por ofrecer dramas de alta calidad, una de sus producciones más recientes está rompiendo la barrera del idioma.
Asura, dirigida por Hirokazu Koreeda, está hablada en japonés, pero eso no ha impedido que se convierta en uno de los mayores éxitos de la plataforma. Es todo lo que un buen drama debería ser: cargado de emociones intensas y narrativas que atrapan desde el primer momento.
Tanto la crítica como el público están elogiando esta miniserie de siete episodios con entusiasmo, y su popularidad no deja de crecer.
¿De qué se trata Asura?
Ambientada en el Tokio de 1979, la trama sigue a las hermanas Takezawa -Tsunako, Makiko, Takiko y Sakiko- quienes descubren que su anciano padre lleva una doble vida con otra mujer. Este hallazgo desestabiliza sus vidas y las obliga a confrontar secretos familiares, tensiones pasadas y emociones reprimidas.
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A través de una narrativa íntima y contemplativa, la miniserie explora las complejidades de las relaciones familiares, los roles de género y la identidad personal en la sociedad del Japón de finales de los años 70. Con actuaciones destacadas y una dirección sensible, Asura ofrece un retrato profundo y conmovedor de la dinámica entre hermanas y los lazos que las unen.
Un drama atípico
Asura es un drama que se sale de lo convencional. Aunque no es completamente original, presenta una versión fascinante de una historia clásica. Detrás de sus cuidadas imágenes y una cinematografía impecable, se esconde el alma de un programa de los años setenta, Ashura no Gotoku. Ambas producciones comparten la misma trama básica, aunque con diferencias apropiadas para la época.
En ciertos aspectos, este drama inmersivo y sutilmente sensual recuerda al clásico de 1959, Hiroshima, mon amour. Cada escena se toma su tiempo, permitiendo que el espectador absorba cada gesto y cada silencio.
Nunca se vuelve tediosa. Su ritmo puede ser más pausado en comparación con dramas occidentales cargados de adrenalina, pero eso juega a su favor. En cuanto a los detalles, decir más sería arruinar la experiencia.
El drama nace de emociones crudas y profundas. Es una exploración culturalmente rica del amor y la traición. También hay lugar para el humor y la ternura: los lazos familiares entre las hermanas son intensos y llenan cada escena de una esperanza palpable, aunque frágil.
Asura conquistó al público
Puede que no sea fácil resumir la serie sin revelar demasiado, pero es evidente por qué tantos la consideran sobresaliente.
En esencia, es un drama profundamente íntimo. Examina un único evento desde todas las aristas posibles. Las consecuencias, tanto lógicas como emocionales, se sienten reales. Lo que al principio parece simple, rápidamente se transforma en un torbellino de mentiras, secretos y emociones reprimidas.
El vínculo entre las hermanas es el eje que une a los personajes, pero también está lleno de tensiones. Cada una tiene una presencia fuerte y bien definida, algo que muchos críticos han elogiado. La serie funciona como un estudio de personajes, y eso es algo muy positivo. Todas tienen su momento para brillar, y resulta imposible no involucrarse emocionalmente. Las actuaciones son sobresalientes y la dirección es precisa, lo que da como resultado personajes profundamente humanos.
Asura es una miniserie que se preocupa por sus personajes tanto como por hacer que el espectador también se preocupe. Plantea preguntas sociales con sutileza, pero sin perder fuerza, y logra una inmersión total.
Dicho esto, no es para todo el mundo. Como toda buena obra, sabe exactamente lo que quiere ser. Es un análisis pausado y meticuloso sobre la autonomía, la feminidad, la fidelidad y el amor. La mezcla de romance y drama puede atrapar por completo, pero no es la elección ideal para quienes buscan acción o ritmo vertiginoso.