El mejor final: la historia de cómo las cenizas de un actor de "Star Trek" llegaron al espacio

El mejor final: la historia de cómo las cenizas de un actor de "Star Trek" llegaron al espacio

Los fans de Star Trek están sorprendidos luego que un empresario de los videojuegos y asiduo viajero del espacio, revelara que llevó las cenizas de un actor de la serie original de los 60.

Redacción QueVer

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Space: the final frontier” decía el Capitán Kirk en la serie de “Star Trek” y sus palabras tienen mucho sentido, en especial para uno de los tripulantes de la USS Enterprise.

En 1966 el mundo conocia la historia creada por Gene Roddenberry que nos presentaba al capitán James T. Kirk (William Shatner), su primer oficial el Sr. Spock (Leonard Nimoy), el oficial médico en jefe Leonard McCoy (DeForest Kelley), la oficial de comunicaciones Nyota Uhura (Nichelle Nichols), el jefe de ingeniería Montgomery Scott (James Doohan) y el teniente Hikaru Sulu (George Takei). 

Desde su salida, esta serie se convirtió en un verdadero universo que fue sumando películas, más series y así por más de cinco décadas.

Ahora se conoció un secreto que involucra a uno de los fallecidos miembros del elenco y la Estación Espacial Internacional. El empresario de los videojuegos Richard Garriott reveló que llevó al espacio las cenizas del difunto Sr. Scott, James Doohan.

Garriott llevó consigo las cenizas del fallecido actor de Star Trek a la Estación Espacial Internacional durante una misión de 12 días en el año 2008.

"Fue completamente clandestino. Su familia estaba muy contenta de que las cenizas llegaran allí, pero a todos nos decepcionó que no pudiéramos hablar de ello públicamente durante tanto tiempo. Ahora ha pasado suficiente tiempo para que podamos", reveló Gariot a The Times.

Según cuenta el sitio CBR, Chris Doohan, hijo del Sr Scott, se puso en contacto con Garriott antes de su viaje al espacio y le pidió el último deseo de su padre “ser sepultado en las estrellas”. Cuando recibió las cenizas, Garriott imprimió tres tarjetas que mostraban una fotografía de Doohan, las recubrió con una lámina y en su interior puso las cenizas, luego las selló.

Una vez que las tarjetas estaban listas, Garriott se las arregló para llevarlas en el viaje. Ya en la ISS, aprovechó y las colocó debajo del revestimiento en el piso del módulo Columbus.

"Hasta donde yo sé, nadie lo ha visto allí y nadie lo ha movido. James Doohan obtuvo su lugar de descanso entre las estrellas", agregó Garriott.

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