La cuarta temporada de Stranger Things en la mira por el uso de una locación indebida

La cuarta temporada de Stranger Things ha demostrado que la serie continúa siendo un éxito entre los suscriptores de Netflix. Tanto así que a poco días de su estreno, el show batió récords en la plataforma, convirtiéndose en uno de los títulos más vistos en sus primeros días de estreno.

Sin embargo, no todos se declararon fanáticos de la nueva entrega de Stranger Things. Las comunidades judías y romaníes han pedido a Netflix que asuma responsabilidad luego de filmar parte de la cuarta temporada en una antigua prisión nazi.

Para las escenas de Hopper (David Harbour) en la prisión rusa, la producción usó como locación la prisión de Lukiškes en Vilnius, Lituania. En 1941, este lugar fue usado durante la Segunda Guerra Mundial como centro de detención de los judíos del gueto de Vilna. La mayoría fueron llevados a las afueras de Vilnius y ejecutados en lo que se conoció como la Masacre de Ponary, donde se acabó con la vida de 100 mil judíos, romaníes y presos políticos de la resistencia.

A raíz de esto, se inició una petición en Change.org, que ya cuenta con 17 mil firmas, para que Netflix se haga responsable por ignorar el Holocausto, exigiendo reparaciones y un pedido de disculpas por el daño ocasionado a estas comunidades. “Esto no solo se burla del trauma compartido de la comunidad judía y romaní”, dice la petición. "Pero profana aún más los recuerdos vivos de los sobrevivientes del Holocausto y sus descendientes".

Pero la queja no se acaba allí, ya que además de la filmación en la prisión lituana, AirBnB comenzó a ofrecer una experiencia temática de Stranger Things dentro de Lukiškes. Desde el 4 de junio que han comenzado a recibir a los primeros visitantes.

"El dinero ganado de esta temporada debe devolverse a las comunidades judía y romaní de Lituania como reparación por el daño que está causando esta temporada y AirBnB, Netflix y Stranger Things deben emitir una disculpa pública de inmediato con una comprensión completa de cómo esto se suma al borrado de las víctimas del Holocausto y la persecución en curso de las comunidades romaníes. También exigimos el cierre inmediato de AirBnB", expresa la petición en el portal Change.org.

Por si fuera poco, muchos también se han quejado del tatuaje que Eleven y los niños del laboratorio tienen en el antebrazo, con el número que identifica a cada uno de ellos. En las redes sociales, muchos señalaron que dichos tatuajes son similares a los que las víctimas del Holocausto llevaban grabados en sus brazos, despojándolos de sus identidades.

Hasta el momento, ni Netflix ni a producción de Stranger Things han respondido ante esta petición. La cuarta temporada de la ficción aún tiene pendiente la emisión de sus dos episodios finales que estarán disponibles el próximo 1 de julio.

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