Gerard Butler sigue los pasos de Scarlett Johansson y demanda al filme "Ataque a la Casa Blanca"

Todo el mundo quedó sorprendido al enterarse que Scarlett Johansson había demandado a Disney por el estreno de “Black Widow” en simultáneo en cines y el servicio de streaming Disney+. Esta acción ha desencadenado una reacción en cadena que ha llegado a varias estrellas de Hollywood, como por ejemplo, Gerard Butler. El actor británico fue alcanzado por el “Efecto Black Widow” y demandó a la producción de la cinta de acción “Ataque a la Casa Blanca”.

El 2013 será recordado por haber tenido dos películas con la misma temática: un ataque a la Casa Blanca y con agente del servicio secreto que lo deja todo por su país. Una de ellas fue la protagonizada por Gerard Butlerer. Esta película alcanzó una recaudación mundial de 170 millones de dólares y generando dos exitosas secuelas, también con Butler en el papel del agente Mike Banning, “Londres Bajo Fuego” (London Has Fallen) de 2016 y "Presidente Bajo Fuego" (Angel has Fallen) de 2019.

Según informó el sitio Variety, Geard presentó una demanda alegando que se le adeudan al menos $10 millones de dólares en compensación por la nombrada película de acción. Butler fue contra Nu Image / Millennium Films, alegando que la producción había subestimado los ingresos nacionales y extranjeros en decenas de millones de dólares y no había informado de $ 8 millones que fueron a sus propios ejecutivos.

“Los productores han ganado decenas de millones de dólares con 'Olympus' (por su título en inglés), pero se niegan a pagarle a Butler un centavo de los ingresos brutos y las ganancias que le prometieron en el acuerdo de las partes. Butler se niega a tolerar las tergiversaciones y otras conductas ilícitas de los Demandados. Butler trabajó con los acusados ??para crear una franquicia de películas de gran éxito. Exige su parte justa", reza en una parte la demanda.

De acuerdo a los datos que desprende Variety, el contrato de Butler le otorgaba el derecho al 10% de las ganancias netas, más el 6% de los ingresos brutos ajustados internos por encima de $ 70 millones y el 12% de los ingresos brutos ajustados en el extranjero por encima de los 35 millones de dólares. Su compañía de producción también tenía derecho al 5% de las ganancias netas, y Butler recibiría ciertas bonificaciones por alcanzar los umbrales de taquilla.

Butler tuvo contratar los servicios de un auditor para que revisara los números, este experto descubrió que los ingresos nacionales del filme estaban subestimados en $ 17,5 millones, y los ingresos de los productores estaban subestimados en $ 12 millones, incluidos los $ 8 millones que fueron para los ejecutivos.