Margot Robbie y una escena que la dejó al borde de la censura

Si hablamos de actrices talentosas en la actualidad, el nombre de Margot Robbie es uno que a menudo está en boca de productores, directores y hasta actores y actrices que quieren trabajar con ella.

La intérprete australiana hizo su debut en la pantalla chica y no dudó en pegar el salto y trasladarse a Estados Unidos en busca de nuevas oportunidades. Luego de algunos roles en series de televisión, Margot tuvo la oportunidad de ponerse bajo las órdenes de Martin Scorsese para interpretar a la bella y seductora Naomi en El lobo de Wall Street, la pareja del personaje de Leonardo DiCaprio.

Desde entonces, Margot Robbie no ha dejado de protagonizar éxitos en la pantalla grande, donde no solo deslumbra con su gran talento actoral sino con su gran belleza. A lo largo de su corta carrera pero extensa filmografía, a la actriz le ha tocado ponerse en el rol de la rubia seductora y protagonizar alguna que otra escena subida de tono, tal como se vio en Focus, junto a Will Smith. Sin embargo, hubo una película que tuvo a Robbie en su reparto y que la mostró como nunca antes.

En 2015 se estrenó La gran apuesta (The Big Short), una comedia dramática sobre la crisis financiera de Estados Unidos que tuvo lugar entre 2007 y 2010. La cinta fue escrita y dirigida por Adam McKay a partir de la novela homónima de Michael Lewis. Además, el filme contó con un impresionante elenco de actores, entre los que destacaron Christian Bale, Brad Pitt, Ryan Gosling y Steve Carell.

Aunque La gran apuesta es recordada mayormente por la ironía y la complejidad que atraviesa su trama, así como por las grandes actuaciones, a la vez es imposible olvidar el cameo de Margot Robbie.

Se trata tan solo de una corta escena de los 130 minutos de duración. En unos pocos segundos logra lo impensado con su hipnótica mirada, copa en mano y un poco de espuma para cubrir sus atributos. 

En dicho cameo, la bella actriz se interpreta a sí misma. Radiante y relajada, Margot aparece en un baño de burbujas bebiendo champagne mientras explica qué son los bonos hipotecarios y las hipotecas subprime.

Sin lugar a dudas, la escena con Margot Robbie es uno de los momentos más destacados de la película donde la temperatura sube a penas unos grados para tratar de comprender un poco más cómo funciona la economía y cómo se llegó a una crisis de semejante magnitud para la economía global. 

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