Star Wars: La historia detrás del cameo más corto y caro de la historia del cine

Los cameos son pequeñas apariciones de grandes actores en series o películas. Al tratarse, por lo general, de estrellas famosas, suelen ser bastante costosos, aunque hay uno que se lleva el podio.

En 2015, se estrenó  Star Wars: El despertar de la Fuerza, cinta que introdujo nuevos personajes como Rey ( Daisy Ridley), Kylo Ren (Adam Driver), Finn ( John Boyega) y Poe (Oscar Isaac); y trajo de regreso a los queridos Han Solo, Leia y Luke. Este último, tuvo un breve paso por la cinta que se convirtió en el cameo más corto y caro de la historia.

El personaje, interpretado por Mark Hamill, hizo su esperada aparición al final de la película. Allí, se puede ver a Rey llegando a Ahch-To donde se cruzará, cara a cara,  con Luke para darle su sable láser.

La aparición de Skywalker dura 30 segundas y, por ella, el actor cobró tres millones de dólares, lo que convirtió este cameo en el más corto y caro de la historia del cine.

En cambio, en Star Wars: Los últimos Jedi  el personaje tiene un rol preponderante, por lo que cobró cerca de 10 millones de dólares, muy por debajo con lo percibido por el cameo si se tiene en cuenta el tiempo en pantalla que este le llevó.

De los veteranos actores que se sumaron a Star Wars: El despertar de la Fuerza,  Carrie Fisher cobro lo mismo que Hamill aunque aparece en pantalla el doble de tiempo que él; mientras que Harrison Ford  se llevó 20 millones de dólares por su trabajo. El actor fue uno de los protagonistas de la historia además de uno de los más activos del trío, por lo que su agente pudo pelear un mejor salario para él.

Más allá de los salarios estipulados por contrato, se cree que cada uno percibió un porcentaje extra de lo obtenido en la taquilla, donde la saga suele arrasar y más aún en este caso en el que volvían a la historia los personajes originales.

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