Dune 3 acaba de perder a uno de los eslabones fundamentales que hizo mágicas las primeras partes
El futuro visual de Dune enfrenta un revés con la salida de una figura fundamental de su producción.
La cinematografía, ese arte de contar historias a través de imágenes en movimiento, ha sido uno de los pilares que definieron a la saga Dune. Desde los desiertos inmensos de Arrakis hasta las opresivas sombras de Giedi Prime, cada cuadro en las películas de Denis Villeneuve destila belleza y profundidad. Sin embargo, un cambio importante amenaza con modificar esta característica
Dune 3, basada en El mesías de Dune, ha perdido a su aclamado director de fotografía, Greig Fraser. El creativo, quien colaboró estrechamente con Villeneuve en las dos primeras entregas, se despide del universo de Frank Herbert debido a conflictos de agenda con The Batman II. Su talento fue clave para dotar a la saga de una identidad estética inconfundible y su trabajo no solo impresionó a los críticos, sino que también potenció la inmersión en la historia, haciendo de Dune una experiencia visual incomparable.

La pérdida de Fraser plantea un desafío significativo para Villeneuve, quien siempre ha priorizado la consistencia visual en sus obras. Aunque este cambio podría parecer un revés para la franquicia. Pero Warner Bros. no ha perdido el tiempo y ya tiene un plan: el elegido para tomar las riendas de la cinematografía es Linus Sandgren, ganador del Óscar por La La Land.
Sandgren llega con la misión de mantener el estándar visual que Villeneuve y Fraser establecieron, mientras aporta su propio estilo a esta historia de ciencia ficción.

El reto no es menor. Sandgren deberá respetar la esencia visual que hizo de Dune un fenómeno cinematográfico, pero también tendrá la libertad de experimentar y evolucionar el lenguaje visual de la saga. Con proyectos como Sin tiempo para morir y Babylon en su currículum, todo indica que es capaz manejar grandes producciones y crear imágenes impactantes.
Mientras tanto, Dune: Messiah sigue tomando forma con un elenco encabezado por Timothée Chalamet, Zendaya y Anya Taylor-Joy. Basada en la segunda novela de Frank Herbert, esta película será una pieza clave para cerrar la trilogía de Villeneuve.