Nosferatu: la razón por la que el Conde Orlok bebe sangre del pecho de sus víctimas en lugar del cuello
Robert Eggers, conocido por películas como La bruja y El hombre del Norte, vuelve al género del terror con su adaptación de Nosferatu, inspirada en el clásico del cine de 1922. Esta vez, el director aporta una mirada fresca y audaz al mito vampírico, alejándose de los estereotipos de Hollywood para sumergirse en las raíces más oscuras del folclore europeo.
Bill Skarsgård, conocido por su interpretación de Pennywise en It, encabeza el reparto como el inquietante Conde Orlok, un vampiro obsesionado con la joven Ellen Hutter (Lily-Rose Depp).
Esta versión de Nosferatu se distancia de otras películas de vampiros en muchos aspectos, pero una que llama poderosamente la atención es que en lugar de beber sangre del cuello de sus víctimas, Orlok lo hace desde el pecho, algo poco habitual en los filmes que exploran la mitología vampírica.
Tráiler de Nosferatu:
Según Eggers, esta elección se basó en los propios relatos folclóricos que describen ataques vampíricos de una manera menos convencional. Según los viejos cuentos populares, las víctimas describían los ataques de vampiros en el pecho.
"En el folclore, cuando las personas experimentaban ataques de vampiros, a menudo describían una presión en el pecho, similar al síndrome de la vieja bruja", explicó Eggers, refiriéndose a lo que hoy conocemos como parálisis del sueño.
Aunque esta representación pueda parecer extraña a primera vista, el director enfatiza que su Nosferatu está profundamente arraigado en fuentes folclóricas. "En algunas leyendas, los vampiros no bebían sangre, sino que tenían relaciones íntimas con sus viudas hasta que estas morían", agregó, subrayando cómo su versión del Conde Orlok busca capturar estas narrativas menos exploradas.
Otro aspecto que diferencia a este vampiro del resto es su aspecto físico. Lejos de esa imagen de los los vampiros glamorosos y seductores que acostumbramos a ver en el cine moderno, el Conde Orlok está inspirado en la imagen de un verdadero cadáver transilvano: una figura cadavérica, desprovista de encanto superficial, que evoca una sensación de terror visceral. "No es un monstruo elegante ni sexy, y eso lo hace destacar", afirmó el cineasta.
El mundo del cine ha visto una saturación de películas de vampiros en las últimas décadas, pero muchas han fracasado en dejar una impresión duradera. Títulos recientes como Abigail (2023), The Last Voyage of the Demeter (2023) y Renfield (2023) no lograron cautivar ni a la crítica ni al público. Sin embargo, las primeras reacciones de Nosferatu apuntan a que Eggers podría romper esta tendencia. Su visión artística, junto a su relato gótico y las actuaciones del elenco, han impresionado a los seguidores del director y a los fanáticos del género de terror.
Nosferatu cuenta con las actuaciones de Nicholas Hoult, Emma Corrin, Aaron Taylor-Johnson y Willem Dafoe. El filme se encuentra actualmente en cines.