Céline Dion regresa a los escenarios con una participación especial en los Juegos Olímpicos

El viernes 26 de julio comenzarán, oficialmente, los Juegos Olímpicos en París. Con una fiesta sin precedentes que promete sorprender al mundo, el país organizador tiene un as bajo la manga: Céline Dion.

Tras dos años alejada de los escenarios, tras ser diagnosticada con el Síndrome de la Persona Rígida, la popular artista canadiense se encuentra en la capital francesa para participar de la apertura que, por primera vez en la historia, no se realizará en un estadio sino que se tratará de un desfile náutico a lo largo del Río Sena, culminando cerca del Trocadero frente a la Torre Eiffel.

De la apertura participarán más de 3000 artistas, entre los que se cuentan bailarines, actores y figuras de la música como Céline Dion y Lady Gaga que también se encuentra en París para la cita deportiva más importante del año.

Al parecer, la canadiense recibiría un pago de 2 millones de dólares por interpretar una canción en la ceremonia de apertura, marcando así su esperado regreso para el que se preparó desde hace meses tal como lo muestra en el intimista documental  I Am: Céline Dion, uno de los contenidos más vistos de Prime Video.

La multipremiada artista, se refirió  a su posible regreso hace pocas semanas en diálogo con Vogue Francia, por lo que la noticia de que sería el espectáculo de cierre de la apertura cobra cada vez más fuerza: “He decidido trabajar con todo mi cuerpo y alma, de los pies a la cabeza, y con un equipo médico. Quiero ser la mejor que pueda, ¡mi objetivo es ver la Torre Eiffel otra vez!”.

Si bien aún no se refirió a su regreso, ya estuvo subiendo imágenes desde París, en las que se la ve sonriente recorriendo la ciudad y recibiendo el afecto de los fans, en un necesario baño de masas tras mientras lucha contra el Síndrome de la Persona Rígida, que padece desde 2022 y que la obligó a alejarse de los escenarios.

Este regreso de Céline Dion al escenario sería, por el momento, un hecho aislado y no significaría un regreso a la escena ya que continúa en tratamiento y, ante mayor estrés y exposición, más complicado es luchar contra el síndrome que no tiene cura pero que, con terapia física, puede hacer más llevadero el dolor y los espasmos.