El momento más difícil de Ana de Armas en El internado

El papel de Ana de Armas en thriller adolescente “El internado” fue crucial durante las primeras temporadas, pero además para ella significó ganar el reconocimiento del público y posicionarse, al menos en España, como una de las favoritas. 

Después de seis temporadas personificando a Carolina Leal Solís, fue quizás su salida de la serie el momento más difícil que tuvo que atravesar. La realidad es que ella quería desprenderse por completo del proyecto, pues sentía que la habían encasillado, pero lo que no sabía es cómo seguiría su carrera, pues no entendía por qué si ya era considerada una estrella no le llegaban otras propuestas.

El trágico final de Ana de Armas en “El internado”

A los procesos internos que Ana de Armas estaba atravesando en relación con su carrera como actriz, se le sumó el desafío de hacer la escena final de su personaje, algo que no era nada fácil, pues se trató de un final totalmente trágico. 

"Con lo dramática que soy yo, me encantaría que hubiera un montón de sangre", dijo De Armas antes de conocer la muerte de su personaje.

En una escena se ve a Carolina Leal Solís tirada en el suelo, cubierta con una sábana y llena de sangre. Lo que en un primer momento parecía una trágica caída accidental, en realidad resultó ser un hecho ocasionado por una persona que sentía que estaba a punto de descubrirla.

Lo que sucedió fue que ella venía sospechando que había un traidor dentro de su grupo de amigos, y cuando estaba a punto de confirmar su teoría y descubrir quién era fue que llegó su final. 

Tras su salida de “El internado”, Ana de Armas decidió mudarse a Los Ángeles, Estados Unidos, con la idea de probar suerte. Para muchos resultó un movimiento muy arriesgado, pero finalmente terminó demostrando que fue la decisión correcta. Hoy triunfa en Hollywood como una gran estrella.

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