House of Gucci: así fue la vida de Patrizia Reggiani mientras estuvo en prisión

House of Gucci: así fue la vida de Patrizia Reggiani mientras estuvo en prisión

En 1995, Patricia Reggiani organizó el asesinato de Maurizio Gucci. La película House of Gucci retrata esta historia llena de odio y venganza.

Redacción QueVer

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El mundo de la moda se ha envuelto en luto en muchas ocasiones con la muerte de grandes diseñadores como la de Gianni Versace, asesinado en julio de 1997, y Alexander McQueen, quien se suicidó en 2010. Ahora, la película House of Gucci recordó otro trágico asesinato que sacudió a todo el mundo: el de Maurizio Gucci, organizado por su esposa Patrizia Reggiani, interpretada por Lady Gaga en la película. 

Para entender los motivos, hay que remontarse a la década de 1950. Reggiani nació en la Provincia de Módena, ubicada en Emilia-Romaña (al norte de Italia), en el seno de una familia humilde. Su padre la abandonó cuando era tan solo una niña y, con los años su madre, llegó a casarse con un rico empresario que las agasajaba con ropa, vacaciones y muchos lujos.

Gracias a la posición económica del hombre, de quien adoptó el apellido, la italiana asistía a eventos de la alta sociedad y fue en uno de ellos donde conoció a Maurizio Gucci. Ambos se enamoraron rápidamente y decidieron casarse dos años más tarde, pese a la oposición del padre del diseñador, Rodolfo Gucci, quien creía que era una cazafortunas.

Asesinato de Maurizio Gucci y los días en la cárcel de Patrizia Reggiani

Antes del divorcio, Maurizio Gucci ya tenía una relación con Paola Franchi, una vieja amiga de la pareja, y planeaba casarse con ella. Esto generó la ira de Patrizia Reggiani, quien no iba a permitir que otra mujer utilizará el apellido de la familia y le quitara todos los lujos que consiguió a lo largo de los años.

"Estaban separados desde hacía tres o cuatro años, pero no se habían divorciado aún, por lo que Patrizia seguía utilizando el apellido Gucci. Ella no estaba enamorada de Maurizio, lo único que le interesaba era mantener su nivel social, su imagen. Sólo quería seguir siendo la señora Gucci", reveló Franchi en una entrevista.

La mañana de su asesinato, el diseñador se despidió de su pareja en el departamento que compartían en la exclusiva calle Corso Venezia. Cuando llegó al edificio, saludó al portero y fue en ese momento cuando un hombre le disparó tres tiros por la espalda, para luego huir en un auto conducido por otra persona.

A raíz de varias investigaciones, se determinó que fue Patrizia Reggiani la autora intelectual del crimen, ya que el abandono del diseñador le generó un gran resentimiento. Por el crimen, fue recluida en la cárcel San Vittore de Milán, donde permaneció durante más de 20 años y perdió todo contacto con sus hijas, quienes no querían saber más nada con ella.

Si bien, la sentencia fue de 29 años, le dieron la libertad tres años antes por buen comportamiento, pero nadie la estaba esperando en la puerta de San Vittore. Hasta el momento, nunca confesó el asesinato de Maurizio Gucci y asegura que no tuvo nada que ver, pero cuando un periodista le preguntó una vez por qué no lo había matado ella, respondió: "Tengo un gran defecto: no tengo mucha puntería. Y no quería fallar".

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