Múnich en vísperas de una guerra: qué tan ciertos son los hechos narrados en la película

Las películas de época son uno de los puntos fuertes de Netflix. La plataforma cuenta con gran cantidad de series y películas de este género que goza de gran popularidad entre los suscriptores del servicio. Es por eso que no sorprende que el reciente drama bélico estrenado días atrás ya esté entre los primeros puestos de lo más visto.

Se trata de Múnich en vísperas de una guerra, la película ambientada durante la Segunda Guerra Mundial, basada en la novela homónima de Robert Harris, publicada en 2017.

La trama transcurre en 1938, en los albores de la Segunda Guerra Mundial. Desde Alemania, Hitler se prepara para invadir Checoslovaquia, mientras que el gobierno británico trata de encontrar una solución pacífica al inminente conflicto. Aquí entran en juego los personajes de dos funcionarios, uno británico y uno alemán, quienes viajan a Múnich para acudir a la Conferencia de emergencia. Cuando las negociaciones están a punto de comenzar, los dos jóvenes tratarán de exponer los planes secretos de Hitler para controlar Europa por la fuerza.

Aunque la película toma un escenario ocurrido en el pasado con algunos personajes reales, cabe preguntarse que tan verídicos y precisos son los acontecimientos narrados en el largometraje. A continuación te contamos cómo fue el verdadero desarrollo de los sucesos históricos y en qué se diferencia del título que arrasa en Netflix.

 

La película, ¿se basa en una historia real?

Múnich en vísperas de una guerra tiene lugar en vísperas de la firma de los Acuerdos de Múnich. Allí se presenta la figura de Arthur Neville Chamberlain, interpretado por Jeremy Irons. Sin embargo, a diferencia del verdadero ex primer ministro del Reino Unido, esta versión cinematográfica del líder conservador británico no carga con ese manto de ingenuidad que lo caracterizó, sino que se presenta como un líder compasivo y cansado de la guerra.

Para hacer un poco de historia, los Acuerdos de Múnich fueron una serie de documentos firmados por los jefes de estado de los gobiernos del Reino Unido, Francia, Italia y Alemania, con el objetivo de poner fin a la Crisis de los Sudetes en 1938. La iniciativa estuvo mediada por el dictador italiano Benito Mussolini, el jerarca nazi Hermann Göring, el primer ministro británico Arthur Neville Chamberlain, y su par francés, Édouard Daladier. De esta forma se aprobó la incorporación de los Sudetes (región perteneciente a Checoslovaquia) a Alemania. De esta forma, Hitler se comprometía a no invadir el país del este.

Por supuesto que no cumplió su promesa, y a penas pasados seis meses de la firma de los acuerdos, invadió Checoslovaquia, seguido de Polonia, Dinamarca, Noruega, Bélgica, y otras naciones europeas. Debido a la incapacidad de prevenir la guerra, a menudo los historiadores consideran que se trató de uno los acuerdos diplomáticos más desastrosos de la historia.

 

¿Qué sucedió realmente con Chamberlain durante los Acuerdos de Múnich 1938?

Como ya se mencionó anteriormente, el largometraje retrata a Chamberlain desde una perspectiva heroica y revisionista, como un hombre dispuesto a sacrificarlo todo con el objetivo de mantener a toda costa la paz del Reino Unido. No obstante, la verdad es bastante menos agradable con la figura de Chamberlain, ya que gracias a su "política de apaciguamiento" hacia Hitler, el líder británico quedó ciego ante las verdaderas intenciones del dictador nazi de avanzar sobre Europa.

 

¿Eran Hugh Legat y Paul von Hartmann personas reales?

Aunque todos estos sucesos ocurrieron en verdad, a pesar del retrato de Chamberlain, interpretado de forma mucho más empática de lo que en verdad era, la parte de la ficción llega de la mano de los personajes de Hugh Legat (George MacKay) y Paul von Hartmann (Jannis Niewöhner), dos jóvenes diplomáticos que intentan detener a toda costa la firma del acuerdo y así prevenir a Europa de entrar nuevamente en guerra.

La historia da cuentas de una conspiración para derribar a Hitler en 1938, pero la forma en la que sucedió no es la misma que se ve en la película. Los dos protagonistas del filme son totalmente ficticios, aunque se cree que Hartmann está inspirado en la figura de un diplomático antinazi llamado Adam von Trott zu Solz.

Von Trott zu Solz era un político y abogado alemán que formaba parte de la resistencia. En 1939, hizo varias visitas a Londres para convencer a Lord Lothian y a Lord Halifax de que presionaran al Gobierno británico para que abandonara su política de permisividad hacia Adolf Hitler. Se afilió al Partido Nazi para conseguir la información necesaria para su plan para derrocar y asesinar a Hitler. Fue arrestado y condenado a muerte el 15 de agosto de 1944.

 

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