Glass Onion: un misterio de Knives Out: una estructura firme que sostiene sus tropiezos

Se hizo esperar Glass Onion: un misterio de Knives Out, la secuela de una de las sorpresas más gratificantes del 2019. Desde que la primera aventura del detective Benoit Blanc se convirtiera en una de las mejores películas de Amazon Prime Video, su posterior cambio de vereda hacia el gigante Netflix junto con la confirmación de una segunda entrega llenó de expectativas a todos los espectadores que habían quedado encantados con este peculiar personaje. 

Pero Glass Onion ya está aquí con nosotros y hay que decir que Rian Johnson supo cómo mantener en órbita un formato que no tiene mucho margen de error. Las películas de detective casi infalible suelen ser o grandes ideas y situaciones tan inverosímiles que ni siquiera en el mundo de la ficción resultan creíbles. 

En esta nueva película, la historia comienza con un grupo de amigos bien distintos que tienen una sola cosa en común: son amigos de un exitoso y millonario empresario que les envía una caja con una serie de acertijos para descubrir que son invitados por él a su isla privada a descubrir quién fue su asesino. A su vez, vemos al detective Benoit Blanc (genial Daniel Craig) en una crisis por la pandemia y su necesidad de un desafío, de alguna situación que saque lo mejor de él. Esto parece ser un detalle hecho solamente para seguir adornando al personaje y pintarlo como excéntrico, aunque vale decir que poco hace en la película y en el mismo detective. 

Cuando los amigos llegan al bote que los llevará a la isla, se sorprenden con la visita del detective, quien también ha sido invitado a esta reunión. Allí comienza lo mejor de la película: una serie de situaciones misteriosas, giros de guión, permanentes sospechas sobre los personajes y un misterio que ni siquiera es claro al principio. Con flashbacks, omisiones y un humor bastante preciso, Glass Onion: un misterio de Knives Out redondea una película muy entretenida, aunque no es mucho más que ello. Hay que decir que a la hora de la investigación, la inventiva del propio Johnson quedó algo corta, con el detective descubriendo cosas solo con espiar a los demás, algo un poco básico teniendo en cuenta la compleja red que tenía Knives Out. Además, hay una carga de chistes coyunturales que parecen más forzados que necesarios. Si bien esto último no afecta directamente sobre el desarrollo, es cierto que por momentos llaman la atención. 

En resumen, Glass Onion no será el mejor ejercicio de cine de misterio, ni el conflicto mejor planteado y resuelto de la historia, pero de seguro funciona muy bien su manejo de la información, sus puntos de giro y sus sorpresas, asegurando así más de 2 horas de entretenimiento, misterio, acción y humor. 

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