La hermosa animación de Netflix de un aclamado director que no te puedes perder

Netflix viene recientemente sumando entregas deslumbrantes en la animación, así como lo hizo el año pasado con la nominada al Oscar, The Mitchells vs The Machines, y 2022 continúa con esta racha. Richard Linklater es probablemente uno de los mejores directores trabajando en la actualidad. Con obras maestras como la trilogía de Before que protagonizaron Ethan Hawke y Julie Deply (Before Sunrise, Before Sunset y Before Midnight), así como muchas otras divertidas aventuras de la adolescencia como Dazed and Confused, Everybody Wants Some y Boyhood, está de regreso.

Así como lo hizo anteriormente con Walking Life en 2001 y A Scanner Darkly en 2006, el director ha regresado a la animación de rotoscopio basada digitalmente en acción en vivo, lo que le da a la película una estética alucinante. En el filme, Linklater mira hacia atrás en el tiempo, llevándonos a los años 60 en esta película familiar intensamente agradable y dulce para Netflix, que recorre la infancia de un niño cuya imaginación se dispara por la misión espacial a la Luna que realiza el Apollo 11.

Jack Black, quien se reúne con el director luego de School of Rock, narra la película como la versión adulta de Stan, un niño de 10 años (cuya voz joven es interpretada por Milo Coy) que está creciendo en un suburbio de Houston a finales de los años 60 junto a su gran familia, y su padre sirve como empleado en la NASA. Como casi todos los niños de la época, Stan está obsesionado con la misión lunar del Apolo 11, y tiene una vívida fantasía en la que los agentes de la NASA lo han elegido para ser un astronauta de prueba ultra secreta para el Apolo 10 ½.  En su fantasía, las autoridades construyeron accidentalmente el módulo de prueba lunar demasiado pequeño, por lo que necesitan de la ayuda del niño del más alto calibre para realizar la prueba y asegurarles a Neil, Buzz y Michael que estarán bien.

En Apollo 10 ½: A Space Age Childhood (Apolo 10 ½: Una infancia espacial en español) Linklater hace que este sueño lúcido del heroísmo infantil anónimo sea solo una parte muy pequeña de una película sumamente real, llena de nostalgia. Nuevamente, el director nos trae un relato sincero sobre la infancia, enfocada en lo que era ser un niño en Houston a finales de los 60 en plena guerra espacial. Con una vibra similar a la de Once Upon a Time in Hollywood o la reciente Licorice Pizza, la película te transportará directo a los años 60, con todos los sabores de helado, programas de televisión, autocines, juegos en el patio de la escuela, padres, abuelos excéntricos, atracciones del parque temático, vecinos, bromas telefónicas y todas las transmisiones a color de Walt Disney que se emitían los domingos por la noche en la televisión que esperamos de los años 60.

La infancia de Stan es muy inocente: no está enamorado de nadie, y no escuchamos nada por el estilo de sus hermanos mayores. El único amor en la vida de Stan es la Luna. Su vida pasa por la misión lunar y sus sueños aspiracionales de convertirse en el primer niño astronauta. El filme no solo te transportará a los años 60, sino que te hará sentir como un niño nuevamente, así como hacen todas las grandes películas de animación.

Apollo 10 ½: A Space Age Childhood se encuentra disponible en Netflix.

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