La secuela de Dirty Dancing habría encontrado su nuevo Patrick Swayze en... Harry Styles

Durante una aparición en el Drew Barrymore Show del jueves, la actriz Jennifer Grey, que se convirtió en toda una sensación en los 80 gracias a roles en clásicos como Dirty Dancing, Ferris Buller’s Day Off y Red Dawn, le confirmó a la carismática presentadora que una esperada secuela se encuentra en camino, y Harry Styles podría estar involucrado.

Se trata de Dirty Dancing, el indiscutible clásico de 1987 en el que la joven Frances "Baby" Houseman de 18 años pasa el verano en un resort de Catskills con su familia y se enamora del instructor de baile del campamento, Johnny Castle, comenzando un romance prohibido con un hombre 6 años mayor. Lamentablemente, el actor que interpretaba a Castle, era Patrick Swayze, quien falleció en 2009.

De todas formas, Grey parece tener en mente un nombre que hará honor a Swayze como su nuevo romance prohibido... Grey le aseguró a Barrymore que la próxima secuela tendrá "baile, música y sexo", y luego planteó una pregunta muy importante: "¿Quién crees que debería ser la próxima pareja inapropiada para Baby?"

Después de un segundo de silencio confuso por parte de Barrymore, Grey anunció su elección: "¿Qué pasa con Shmarry Shmiles?" Cuando la anfitriona aún no captaba lo que Gray estaba diciendo, la actriz se lo explicó un poco más: "Alguien que rima con Shmarry Shmiles". Más silencio confuso, y luego la luz del cerebro de la pequeña niña de E.T. que ahora lidera los daytime talk-shows finalmente se encendió: "¡HARRY STYLES! ¡SÍ!" gritó, mientras la multitud vitoreaba con aprobación.

Aún falta ver qué opina Styles de la propuesta, pero no es una idea totalmente loca. El cantautor de 28 años continúa construyendo su currículum actoral luego de su debut en 2017 con el drama bélico de Christopher Nolan, Dunkirk. Próximamente, el artista detrás del nuevo hit “As It Was”, protagonizará el nuevo thriller de su novia Olivia Wilde, Don't Worry Darling, donde actúa junto a Florence Pugh.

Durante su entrevista con Barrymore, Gray también recordó haber filmado el famoso baile de Dirty Dancing que resultó en el icónico The Lift, y lo aterrorizada que estaba. "No lo hice hasta el día que lo filmamos", dijo. "Me negué. Literalmente estaba demasiado asustada... y básicamente no podía hacerlo. No pude hacerlo hasta el día en que toda la gente estaba mirando, y luego tuve que hacerlo".

Aunque aún se sabe muy poco sobre la secuela del clásico de 1987, esperamos que la Baby de Grey logre revertir los roles del filme original y sea ella quien tiene el romance prohibido… ¡con nadie menos que Harry Styles!

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