El drama adolescente de Netflix que se transformó en una de las mejores del género

Hay un elemento que pueden contener las películas y que, más allá de géneros o gustos, nadie puede dejar de rescatar. Se trata de la capacidad de los realizadores de poder representar las emociones de las personas de forma original, genuina e inteligentemente. Cuando los directores pueden no forzar situaciones, no repetir un cliché o una respuesta convencional. Cuando los personajes de estas películas pueden, en un efecto tan paradójico como mágico propio del cine, trasladarse al interior de los espectadores mientras que también logran su propia individualidad. Ellos sufren, gozan, lloran o desean como muchos, pero sin dejar de ser ellos mismos. 

Y esto es exactamente lo que sucede en Las ventajas de ser invisible, la película dirigida por Stephen Chbosky que se estrenó en 2012 y que resultó una de las sorpresas del año. En una producción pequeña (para el estándar estadounidense), este film logró una impronta única para tratar una temática ampliamente abordada en el cine contemporáneo: las relaciones y sociabilización de los adolescentes. 

En esta historia veremos como Charlie (Logan Lerman) debe lidiar con los problemas que le trae comenzar la preparatoria apenas un mes después de que su mejor y único amigo se haya suicidado. Por si fuera poco, no tiene una gran relación con su familia, y solo añora a su tía, quien falleció cuando Charlie tenía 7 años. Con constantes ataques de ansiedad y timidez, comienza el año escolar, donde se hará amigo de Sam (Emma Watson) y su hermanastro Patrick (el genial Ezra Miller antes de su desvarío). Además, escribirá en un libro que le servirá como una suerte de catarsis, en el que se apoyará para intentar superar estas dificultades. 

Como comentaba, la premisa de esta película puede asemejarse con otras historias, y bien podría haberse desarrollado sin pena ni gloria. La diferencia clave es que el director está lejos de encontrar soluciones fáciles a estos problemas, y que además guarda bajo su manga un entramado de conflictos anteriores que el mismo Charlie irá recordando poco a poco. Además, este Charlie es un chico que calla, se ensimisma, nos pone más de una vez en la posición de que queremos empujarlo a “hacer lo correcto”, o por lo menos lo que sabemos que es lo que él haría. Esa tensión se mantiene el tiempo suficiente para que el mismo Charlie comience a empujar la narrativa. 

Por si fuera poco, en la película se nombran una gran cantidad de obras literarias, audiovisuales y musicales que hasta sirven para que quien quiera disfrutar otro tipo de clásicos tome nota. Desde películas como The Rocky Horror Picture Show, Reds o El Graduado; libros de la talla de A este lado del paraíso de Scott Fitzgerald o El Extranjero de Camus; hasta canciones de Simon and Garfunkel, los Beatles o The Smashing Pumpkins. Una verdadera lista de clásicos imperdibles para cualquiera que disfrute del arte en todas sus aristas. 

En resumen, Las ventajas de ser invisible es una película imperdible dentro del catálogo de Netflix, sin dudas una opción que no puedes dejar de disfrutar.  

Déjanos tu mensaje con tu opinión o comentario sobre alguna serie, película o programa. ¿Qué te gustaría leer sobre celebridades, películas, series o plataformas? ¡No dejes de escribirnos a contacto@quever.news!