De qué nacionalidad es Ana María Polo y cómo fue su infancia

Desde hace 20 años, Ana María Polo tiene a los espectadores de su lado. Con su carisma y talento, la presentadora logró que la audiencia la eligiera como una de las celebridades más queridas.

La fama llegó con Caso cerrado, el famoso programa de telerrealidad que encabeza desde el 2001. En dicha producción no solo demostró su talento y conocimientos como abogada, sino que también protagonizó grandes escenas con los participantes.

Debido a que el programa se emite en alrededor de 21 países, la popularidad que ganó la Doctora es sorprendente. Por esta razón, la presentadora cuenta con muchos seguidores en diferentes partes del mundo que la adoran y aprecian. Sin embargo, aunque su vida esté repleta de lujos y de mucha fama, no siempre fue de color de rosas. La presentadora ha tenido que atravesar una infancia muy complicada, donde aprendió de los malos momentos y se volvió aún más fuerte.

La dura infancia de Ana María Polo

Según la propia Doctora Polo, uno “no puede tener todo“ en la vida. De esta manera, admitió que ha tenido una vida repleta de bendiciones e inolvidables momentos, pero también tuvo que transitar muchos dolores. A pesar de que la vida la golpeó en varias ocasiones, la mujer nunca fue derribada y siempre intentó salir para adelante. Desde que es muy pequeña, la conductora de Caso cerrado tuvo que enfrentarse a los duros momentos de la vida.

Aunque resida en Estados Unidos hace muchísimos años, Ana María Polo nació en Cuba en 1959. Pero la desconformidad de su familia con Fidel Castro, hicieron que todos emigraran hacia Puerto Rico y comenzaran un nuevo capítulo de su vida.

Arrancar desde cero en nuevo país, donde no tenía amigos ni conocidos, fue bastante difícil para la presentadora. Cuando era pequeña tuvo que enfrentarse a amenazas y burlas por parte de sus compañeros. El motivo era su nacionalidad. Debido al bullying que recibía, la conductora tuvo que ser protegida por custodia. Unos años después de vivir este infierno, sus padres tomaron la decisión de volver apostar por otro país y esta vez eligieron Estados Unidos. Así, todos comenzaron a vivir en Miami.

A pesar de vivir una infancia muy complicada, donde el odio era el sentimiento que más recibía por parte de extraños; Ana María Polo se mantuvo fuerte y se convirtió en una mujer que lucha cualquier batalla.