Ben Affleck habló del infierno que le tocó vivir mientras estaba casado con Jennifer Garner

Ben Affleck se encuentra en uno de los mejores momentos de su vida personal y profesional. Desde hace algunos meses, el actor se encuentra nuevamente en pareja con Jennifer Lopez, su viejo amor de principio de los 2000.

Affleck, que estuvo casado con Jennifer Garner, mantiene una relación de amistad y afecto con su ex con quien comparte tres hijos en común: Violet (16), Seraphina (12) y Samuel (9).

El intérprete de 49 años suele ser bastante reservado sobre su vida privada. Sin embargo, en las últimas horas Affleck se sinceró sobre su relación con Garner y aseguró que durante el tiempo que duro su matrimonio con la actriz, vivió un "verdadero infierno".

"Es una de las razones por las que comencé a beber... porque me sentía atrapado", dijo Affleck en una entrevista en Howard Stern Show. Allí, el actor reconoció que si siguiera casado con Garner, probablemente seguiría bebiendo.

En la actualidad, Affleck mantiene una buena relación con su ex, pero en los últimos años de su enlace, se sentía completamente infeliz. El actor explicó que no se podía ir por sus hijos, pero no se sentía feliz, por lo que no sabía qué hacer. Fue entonces cuando comenzó a beber. "Lo que hice fue beberme una botella de whisky y quedarme dormido en el sofá, que resultó no ser la solución”, relató el director de Argo.

También reconoció que junto a Jennifer hicieron todo lo posible para enmendar su situación sentimental. “La verdad es que nos tomamos nuestro tiempo, tomamos la decisión… Nos separamos”, dijo, al tiempo que reconoció que la cosa no funcionó entre ellos. “Al final, lo intentamos. Lo intentamos, lo intentamos porque teníamos hijos. Ambos sentimos que no queríamos que ese sea el modelo de matrimonio que nuestros hijos vieran", relató.

Ahora el actor se encuentra en una relación con JLo, con quien retomó contacto a principios de año, tras romper con Ana de Armas. El actor también reconoció que tuvo dudas a la hora de reconectar con su ex, con quien había estado en una relación entre 2002 y 2004.

Affleck sabía que si retomaba su relación con la cantante, la prensa y los paparazzi se pegarían como moscas, algo que lo llevó a preocuparse por sus hijos. "Mi vida les afecta", explicó Affleck. "Yo y su madre somos celebridades. Eso es duro", reconoció.