Emilia Clarke contó como fue trabajar en Game of Thrones tras su grave problema de salud

En 2019, Emilia Clarke reveló en una carta al New Yorker que había sufrido un grave problema de salud, causado por dos aneurismas mientras rodaba Game of Thrones y participada de Broadway. 

La actriz tuvo su primer aneurisma tras concluir en 2011 con el rodaje de la primera temporada de la serie éxito de HBO, es decir cuando tenía 23 años. Dos años más tarde, mientras participaba de “Breakfast at Tiffany's” en Broadway, sufrió una descompensación, que luego un estudio reveló que era otra aneurisma, por lo que de inmediato fue intervenida.

Emilia mantuvo en secreto estos duros sucesos que golpearon su salud en el mayor hermetismo posible. Ahora con la publicación del libro “Fire Cannot Kill a Dragon” de James Hibberd, salen a la luz muchas anécdotas del show, como batallas costosas, escenas menos queribles y también el gran problema de salud de Emilia.

En este libro, “Daenerys Targaryen” revela que cómo consiguió ocultar lo que le ocurría mientras rodaba y tenía que lidiar con la gran presión que ejercían los fans del show.

“Sentí como si una banda elástica estuviera estrujándome el cerebro. Fui al lavabo, me caí de rodillas y me puse a vomitar de manera violenta y voluminosa mientras el dolor se volvía peor”, relató la actriz cuando tuvo la primera aneurisma.

Luego del segundo ataque la “madre de los dragones” relató “Estábamos en el desierto, hacía calor, y yo tenía el miedo constante de que me iba a dar otra hemorragia cerebral. No paraba de pensar: ‘¿Me voy a morir? ¿Me va a pasar en el set? Eso sería muy inapropiado’. Y toda lesión cerebral te deja con una fatiga tremenda, indescriptible. Intentaba por todos los medios que no se me notara”.

“En todos mis años en el programa, nunca puse la salud personal en primer lugar, que es probablemente la razón por la que todos los demás estaban preocupados”, explica Clarke en la cita que recopila el sitio Vulture.

En cuanto al secreto de Emilia, solo pocas personas lo sabían, uno de ellos era uno de los creadores del show, DB Weiss quien relató: “fue aterrador porque este increíble, dulce y maravilloso ser humano estuvo tan cerca de no estar más”.

Por último, la actriz cuenta:“durante todos mis años en la serie, nunca puse mi propia salud por delante, lo que probablemente hizo que el resto de la gente se preocupara al darse cuenta de ello. No querían que trabajara demasiado duro. Yo no quería que pensaran que era un fracaso, que no podía hacer el trabajo para el que me habían contratado".