Conoce al verdadero dueño de la mansión que aparece en la temporada final de Succession

El pasado domingo se estrenó la cuarta y última temporada de Succession que encontró a los Roy en pie de guerra y con nuevas propiedades por las que pasearse. Una de ellas es la mansión de Roman Roy, donde los cuatro hermanos se reúnen tras la celebración de cumpleaños de Logan.

La moderna construcción no es un set ni está ubicada en Nueva York, donde se sucede la acción principal de la historia; sino que se trata de una mansión ubicada en Los Ángeles, valuada en 83 millones de dólares, que pertenece a Austin Russell, fundador y CEO de Luminar Technologies.

El joven de 28 años, denominado por Forbes como el "millonario hecho a sí mismo más joven del momento", cuenta con un patrimonio de más de 1.600 millones de dólares, pero, para poder adquirir la mansión que sale en Succession, debió vender 10 millones de acciones de su empresa Luminar, por un valor de 220 millones de dólares.

La casa por la que Russell tuvo que dejar ir parte de su imperio tecnológico está ubicada dentro del barrio residencial Pacific Palisades, en el oeste de Los Ángeles y a unos treinta kilómetros del centro de la ciudad.

La propiedad cuenta con seis dormitorios, dieciocho baños, un cine privado, un completo spa, dos habitaciones blindadas y un tejado móvil para contemplar las estrellas. Como si todo esto no fuera suficiente, cuenta además con escáner de retina para acceder al dormitorio principal.

Entre los vecinos de este joven multimillonario se encuentra J.J. Abrams, Ben Affleck, Judd Apatow, Matt Damon y los oscarizados Tom Hanks y Jamie Lee Curtis.

Por el momento, se desconoce si la propiedad volverá a aparecer o no en la temporada, aunque se espera que sí, ya que es señalada como la nueva propiedad de Roman Roy, el hijo menor de Logan.

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