Crítica de IT: Bienvenidos a Derry: la precuela de HBO intriga pero se queda en el susto fácil
La precuela de IT llega a HBO con grandes actuaciones y guiños al universo de Stephen King, pero con menos terror y muchas más historias en juego.

Tras la adaptación de IT, estrenada en dos partes en 2017 y 2019, quedó demostrado que el universo creado por Stephen King no solo es uno de los más aterradores, sino que tiene muchas más aristas por explorar.
Eso es precisamente lo que se propuso HBO con IT: Bienvenidos a Derry, la nueva serie creada por Andy Muschietti y Barbara Muschietti, que oficia de precuela de las películas lanzadas años atrás. Pese a que la idea es prometedora, la nueva propuesta de la señal se queda a mitad de camino y no logra evocar el terror que definió a las entregas anteriores. O al menos eso es lo que puedo señalar tras haber visto los cinco episodios que HBO puso a disposición para su visualización.
La ficción de 8 episodios está ambientada 27 años de los acontecimientos conocidos en la película, trasladándose a la década de los 60, para explorar los orígenes del mal que acecha al pueblo de Derry y sus habitantes, así como la aparición del terrorífico Pennywise, una vez más interpretado por Bill Skarsgård.
Tráiler de IT: Bienvenidos a Derry:
IT: Bienvenidos a Derry nos traslada a 1962 al ya conocido pueblo. La amenaza de la guerra fría, el terror atómico y el racismo aún están latentes en cada habitante. Allí conocemos a Matty, un pequeño que se escabulle en el cine local hasta que el guardia lo obliga a escapar. Pero lejos de una simple travesura, lo que Matty busca es escapar de su abusivo padre y de Derry, un lugar que para él es el mismísimo infierno. Caminando bajo la nieve, una familia lo levanta en medio de la noche, indicando que se dirigen camino a Portland. Sin embargo, lo que podría ser un su única escapatoria, termina convirtiéndose en una secuencia de pesadilla, dejando en claro que nadie puede irse de Derry sin experimentar el terror que allí habita.
Te podría interesar
A medida que la historia avanza conocemos al capitán Leroy Hanlon (Jovan Adepo), un piloto condecorado que regresa de Corea para trabajar en la base militar de Derry, que se encuentra trabajando en un proyecto ultrasecreto. Lo acompañan su esposa Charlotte (Taylour Paige) y su hijo de 12 años, Will, quienes pronto descubren que Derry no es un lugar cualquiera. Extraños sucesos, desapariciones y misteriosas muertes, presagian que lo peor está por venir.
Entre los personajes que se cruzan en el camino de los Hanlon aparece Dick Hallorann (Chris Chalk), un soldado con un don especial que se ha convertido en una pieza clave del ejército para tratar de encontrar y controlar la entidad de acecha la ciudad.
Y en medio de este panorama, encontramos un grupo de adolescentes que comienzan a experimentar lo inimaginable, y que se cargarán al hombro la tarea de demostrar que detrás de las desapariciones y muertes de niños recientes, hay una fuerza sobrenatural capaz de meterse en sus cabezas y hacerlos vivir una situación aterradora.
La precuela de HBO intenta (sin lograrlo del todo) revivir el terror de Pennywise
La primera película de IT fue toda una revelación. Allí conocimos a un grupo de amigos que se enfrentan al demoníaco Pennywise, interpretado por Bill Skarsgård. Bienvenidos a Derry buscar repetir una buena parte de esa misma fórmula: junta a un grupo de chicos más bien marginados que les va a tocar vivir en carne propia las pesadillas de IT, pero con mucho menos terror y con una atmósfera no tan inquietante.
Pero buena parte del problema de la serie está en su estructura. La trama se bifurca en muchos personajes e historias, lo que hace que ese miedo pierda fuerza de un capítulo a otro. Casi no hay momentos de terror genuino, y los pocos que hay, carecen de impacto debido a lo mal logrados que están muchos de los efectos visuales, más caricaturescos que otra cosa.
Pero quizás lo más decepcionante de todo es la poca presencia de Pennywise. Skarsgård aprovecha bien sus breves minutos en pantalla, pero su presencia es tan escasa que uno termina deseando que el payaso aparezca para sacudir la historia.
Si algo hacía funcionar a las películas de IT era el carisma de su elenco infantil. En Bienvenidos a Derry, los más jóvenes no logran el mismo efecto. Las dinámicas entre ellos parecen forzadas, y los diálogos bastantes superficiales. En cambio, los adultos cargan con el peso dramático y salvan buena parte del relato. Por ejemplo, Jovan Adepo se luce como el capitán Hanlon, un hombre dividido entre su deber militar y la necesidad de proteger a su familia. Taylour Paige, por su parte, aporta gran fuerza emocional como Charlotte, una mujer decidida que no teme en hacer frente al racismo estructural así como al miedo a lo desconocido.
Chris Chalk también destaca como Hallorann, evitando la simple imitación del personaje original y aportando profundidad al vínculo entre lo humano y lo sobrenatural. Y entre los niños, la pequeña Clara Stack se roba las escenas como Lilly, una chica marcada por la pérdida que termina enfrentando a Pennywise con más coraje del que uno esperaría.
IT: Bienvenidos a Derry tiene muchos guiños para los fanáticos de Stephen King, en especial para aquellos familiarizados con el libro. Hay referencias a la pandilla de Bower, los orígenes indígenas de la criatura y conexiones con otras obras del autor. El problema es que, en su intento por conectar piezas, la serie se olvida su principal propósito, que es el de generar terror.
Es cierto que la serie busca dejar de manifiesto que el terror va mucho más allá de Pennywise, que se esconde detrás de cada pequeña acción de los habitantes del pueblo. Pero termina siendo una ficción que se decanta por el camino del misterio y el drama, con toques sobrenaturales.
IT: Bienvenidos a Derry no es una mala serie, pero se vuelve inevitable no compararla con las películas de Muschietti o con la obra de King. Seguramente los fanáticos del lore la disfrutarán mucho más que quienes no conocen nada del terrorífico universo de Derry.
La serie se estrenará el 26 de octubre por HBO y HBO Max, con el estreno de un nuevo capítulo cada domingo.






