La exigencia de Michael Jordan que marcó el rodaje de Space Jam

En 1993, Michael Jordan anunció su retiro del básquet, decisión que revocó un año después para sumarse a la temporada 1994-1995 de la NBA junto a los Chicago Bulls. Fue por aquel entonces, que Warner Bros. lo convocó para protagonizar Space Jam, una película que combinaba personajes de carne y hueso con dibujos animados en una épica aventura deportiva que se convirtió en un fenómeno de masas.

A 27 años de su estreno, se dio a conocer una de las exigencias que tuvo Michael Jordan para con el equipo de producción y que se convirtió en una cláusula que de no cumplirse ponía en duda su presencia en la cinta.

Así, el basquetbolista consiguió que Warner Bros. aprobara la construcción de un gimnasio de última tecnología en el set para poder entrenar entre toma y toma, y así no perder el ritmo de sus compañeros de equipo.

El espacio contaba con una cancha de baloncesto de tamaño regulado, aparatos y pesas; vestuarios con duchas, un green para jugar al golf, sistemas de sonido y televisores gigantes para seguir los partidos de la liga y así poder estudiar al rival en plena filmación.

Para mantenerse en forma en el campo de juego, varios basquetbolistas participaron de pequeños partidos en el set para mantener la habilidad de Jordan, sobre todo Charles Barkley, Patrick Ewing, Shawn Bradley, Larry Johnson y Muggsy Bogues que tenían una participación especial en el filme.

"Fueron algunos de los mejores partidos que hemos jugado", expresó Reggie Miller, escolta de los Indiana Pacers, y uno de los invitados a participar de estos partidos en los que todos los jugadores terminaban entrenando a la par para una de las temporadas más competitivas de todos los tiempos.

Fue, gracias a este gimnasio, que Michael Jordan puso ponerse a punto antes de su regreso mejorando, inclusive, su gran nivel dentro del campo de juego.

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