Los secretos detrás del rodaje de uno de los clásicos más aclamados de Elizabeth Taylor

El sábado 3 de agosto llegó a Max la esperada serie documental Elizabeth Taylor: Las Cintas perdidas. Con este lanzamiento, la vida de la oscarizada actriz vuelve al centro de la escena a 13 años de su fallecimiento, revalorizando y acercando a las nuevas generaciones su extensa filmografía.
Una de las películas que más atención atrajo es ¿Quién teme a Virginia Woolf?, basada en la obra de teatro en tres actos del dramaturgo estadounidense Edward Albee, estrenada en 1962.
Crédito: Warner Bros. Pictures
"Martha y George son un matrimonio maduro, que llevan juntos 20 años. Ella es hija de un rector universitario. Es una mujer fuerte que aun conserva su belleza, pero con reacciones en ocasiones violentas. Él es algo más joven, igualmente apuesto, y dotado de una inteligencia inquietante. El matrimonio invita a una velada en casa a un joven profesor de la Universidad y su esposa. Ante la mirada de sus invitados Martha y George caen en un huracán de riñas, reproches mutuos y odios ocultos. Tras la marcha de Nick y Honey, los anfitriones vuelven a enfrentarse con su soledad", reza la sinopsis oficial del clásico dirigido por Mike Nichols en 1966.
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Para Elizabeth Taylor esta cinta fue todo un hito, ya que le dio el segundo Oscar de su carrera y la confirmó como una gran actriz, más allá de su exorbitante belleza y su vida privada que siempre terminaba convertida en noticia.
Mira el tráiler:
Con un texto denso y por demás dramático, el rodaje de ¿Quién teme a Virginia Woolf? estuvo cargado de secretos, que convirtieron a la cinta en una producción única.
Un auspicioso debut
Mike Nichols llegó a Hollywood tras años dirigiendo en Broadway, para ponerse al frente de esta adaptación por la que fue nominado al Oscar.
Su segundo trabajo fue tan, sino más, aclamado que este: El graduado.
Crédito: Warner Bros. Pictures
Transformación física
Para Taylor, de 33 años, el rol de Martha implicó un gran trabajo interpretativo y físico ya que debió subir 13 kilos y aventajarse en maquillaje para dar con la apariencia de una mujer de 52 años.
Juntos, otra vez
La actriz y su gran amor, Richard Burton, compartieron escena once veces, siendo está la cuarta oportunidad en la que compartían set.