Maritza Rodríguez regresa a las telenovelas y explicó la razón detrás de su decisión

En 2018, la reconocida Maritza Rodríguez se casó con Joshua Mintz, un productor de televisión mexicano-judío, con quien se estableció en Jerusalén tras una profunda conversión religiosa que la llevó a cambiarse el nombre por el de Sarah Mintz y alejarse de las telenovelas por presentar su trabajo un conflicto con su fe.

A cuatro años de su salida de la televisión, la actriz colombiana habló de su decisión en “Secretos de villanas” es una serie de Canela TV que combina un talk-show con un reality show, y en el que las reconocidas villanas de telenovela Aylín Mujica, Gaby Spanic, Sabine Moussier, Cynthia Klitbo y Geraldine Bazán comparten sus secretos.

Durante el primer episodio, titulado “Las villanas también lloran”, Sarah Mintz rompió el silencio y habló de todo sin tapujos.

"Mi esposo no tuvo nada que ver con mi decisión de retirarme y para centrarme en mi religión. La decisión fue absolutamente propia", comenzó diciendo.

A la par que criaba a sus gemelos Akiva y Yehuda, Mintz dedicaba sus días a construir su bienestar espiritual, al que, con su ajetreada agenda laboral, nunca le había prestado la debida atención.

"El primero que me dijo que volviera fue mi rabino. Me dijo que era una misión. Es un mundo por descubrir, descubrir a la mujer, al ser humano, descubrir que somos reales", dijo la actriz.

“Amantes del desierto” (2001), "Ángel Rebelde” (2003), “Acorralada” (2007) y "El Rostro de Analía” (2008), fueron los trabajos más importantes de Sarah Mintz y los que marcaron su camino en la televisión colombiana como una temible villana.

En 2016 llegó su último trabajo, “Silvana sin lana”, junto a Carlos Ponce, con el que se despidió de la televisión en pos de centrarse en su familia y la fe, que hoy la trae de regreso como una misión.

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