La escena eliminada en Terminator que hubiera cambiado todo

La escena eliminada en Terminator que hubiera cambiado todo

El director James Cameron decidió cortar esta escena que anticipaba parte de la segunda entrega por un insólito motivo.

Nicolás Berte

La película Terminator fue sin dudas uno de los grandes éxitos de la década de los 80. Incluso a pesar de cierta reticencia al comienzo, la película acabó convirtiéndose en un éxito absoluto, que llevó a que se hicieran 6 películas más, a lo largo de más de 30 años. 

Lo increíble de todo esto es que en la primera entrega, estrenada en 1984, hubo una escena eliminada que hubiera cambiado las demás entregas, o por lo menos anticipado lo que se vendría. Tan importante fue la revelación que el propio productor explicó porqué fue cortado ese momento, donde se veía a un par de empleados de Cyberdyne Systems recuperar el chip del T-800, que había sido destruido previamente. 

En principio, la película parecía cerrar de manera perfecta con este giro de guion, que modificaba sustancialmente cómo terminaba la película y anticipaba lo que vendría más adelante. Recordemos que el T800, el robot interpretado por Arnold Schwarzenegger, había sido enviado para asesinar a Sarah Connor. Como ella termina venciendo a Terminator, pareciera que el plan no funciona. Sin embargo, la recuperación de este chip por parte de estos empleados les permite a la empresa conocer la tecnología que llevará a la invención de las máquinas, que darán inicio a la guerra del futuro. 

Pero, a fin de cuentas, había algo que importaba más que este giro, y es que la escena estuviera bien actuada. Lo que sucedió fue que las personas que actúan en esta escena eran en realidad personas que habían financiado la película, y que parte de la devolución por su apoyo era una pequeña parte en la película. 

Toda la saga de Terminator podría haber cambiado si esa escena hubiera existido. /Foto: 
Metro Goldwyn Mayer

El propio Hurd dijo que "John Daly, el financista de la película, tenía un principio de acuerdo pero aún no había logrado ningún éxito significativo. Insistió con que utilicemos otros financistas no actores para esta escena, y el resultado fue catastrófico. Ellos esperaba un retorno de dinero por su inversión y no estábamos seguros de poder lograrlo, ya que la película costó 6,4 millones, que en su momento era mucho."

Básicamente, cuando James Cameron vio cómo había salido esa escena, prefirió dejar en la mente de los espectadores, o por lo menos esperar a una eventual segunda entrega, que en realidad la serie de eventos de la primera película no habían salido tan bien como todos creíamos. 

Suscríbete a nuestro newsletter para recibir todas las novedades y participar de concursos exclusivos desde aquí.

Temas